Estrenar coche, reformar tu casa o estudiar el máster que llevas tiempo queriendo hacer son solo algunas de las ideas a las que quizá le empieces a dar vueltas de cara a hacer tu lista de propósitos para 2025. Si crees que no tienes ahorros suficientes para ponerlas en marcha, financiarlas puede ser tu solución, pero siempre que lo hagas con cabeza y analizando las cuestiones básicas que te permitirán encontrar el producto que mejor se adapta a tu perfil, al mejor precio.

Lista de propósitos para 2025
A continuación, te contamos cuáles son esas claves y te explicamos cuáles son algunos de los préstamos que puedes encontrar a día de hoy para emprender cualquiera de tus retos para el nuevo año.
5 claves imprescindibles para financiar tus proyectos
Vigila el TIN sin olvidarte de la TAE
A la hora de financiar tus proyectos para 2025, es importante que empieces por entender los intereses que te van a cobrar (el TIN o Tipo de Interés Nominal) y las comisiones, que junto al TIN te permitirán averiguar el coste real de la operación, es decir, la TAE (Tasa Anual Equivalente). Estas cifras son las que te van a permitir saber si estás ante una opción cara o barata para pagar a plazos, por ejemplo, la compra de un coche nuevo o la reforma de tu cocina.
Calcula qué cantidad necesitas, con qué urgencia y en cuánto tiempo la quieres devolver
Una vez entendido cuál será el coste de la operación, hay otra serie de elementos que también hay que tener en cuenta, como la cantidad que deberías pedir, la urgencia o rapidez con la que necesitas el dinero y el plazo de devolución que te gustaría establecer. Esto te permitirá entender cuestiones como tan cruciales como si es mejor financiar tus proyectos con una tarjeta de crédito (más rápidas de utilizar, pero normalmente más caras y pensadas para cantidades más pequeñas) o un préstamo personal (diseñados para cantidades más elevadas, con una tramitación algo más lenta, pero normalmente más baratos). También podrás llegar a entender si el plazo de devolución que tenías en tu cabeza es el más adecuado o si puedes ajustarlo más para terminar pagando menos intereses por la operación.
Entiende cuáles son tus opciones
Los productos bancarios más usados para financiar proyectos de cierta envergadura son las tarjetas de crédito y los préstamos personales. Ambos son muy similares, ya que te permiten disponer de una cantidad de dinero que tendrás que devolver en un plazo de tiempo junto con unos intereses y/o comisiones. Sin embargo, en función de la cantidad que necesites pedir, del plazo de devolución que estimes oportuno y de otras cuestiones (como la urgencia de la operación), te convendrán más unos u otros. Por ejemplo, imagina que quieres financiar un máster, que cuesta 15.000 euros, y que lo que te gustaría es devolver el dinero a lo largo de los 24 meses que dura la operación. En ese caso, tanto la cantidad que necesitas como el plazo de devolución harán que te decantes por un préstamo personal, ya que tanto las ofertas más adecuadas a estas cantidades, como las más baratas, siempre serán de este tipo.
Sopesa si te merece la pena cambiar de banco
Una vez elegido el producto de financiación que más te conviene, toca empezar a buscar. En este proceso, es habitual que te encuentres dos tipos de ofertas: las que exigen vinculación bancaria (es decir, que domicilies la nómina en un nuevo banco y que, incluso, contrates productos extra, como seguros) y las que no lo hacen. A la hora de decidir entre unas y otras debes tener que en cuenta que, si bien las primeras pueden ser algo más económicas que las segundas, no debes perder de vista que:
- Esos productos o servicios extra que te exijan contratar pueden tener un coste adicional que tendrías que sumar a los intereses y/o comisiones que tendrías que pagar. Y dependiendo del tiempo que tengas que mantenerlo contratados, puede que su factura final sea muy elevada.
- Estar atado a un banco o financiera durante todo el tiempo que tardes en devolver tu deuda te impedirá aprovechar nuevas promociones de otras entidades: por ejemplo, posibles promociones por domiciliar tu nómina.
Entiende bien la letra pequeña
Más allá de los aspectos fundamentales de cualquier producto de financiación (el TIN, la TAE, las comisiones, etc.) es importante que compares entre todas las ofertas del mercado, que entiendas bien las que más te interesa y, en última instancia, que analices con detenimiento el contrato antes de firmar. ¿No entiende algo? No dudes ni un segundo en preguntar. Ese esencial que cada uno de los puntos de la documentación preliminar te queden 100% claros para evitar disgustos en el futuro.
Dos préstamos perfectos para financiar tus proyectos del año nuevo

Préstamos Cetelem
En Cetelem podrás encontrar un total de nueve préstamos personales que no exigen ningún tipo de vinculación, con los que podrás pedir entre 6.000 y 60.000 euros, y que están diseñados para distintas finalidades: desde comprar un coche nuevo, hasta financiar tus próximos estudios, pasando por una reforma en el hogar o una boda. El TIN que aplica sus préstamos se mueve en una horquilla que va del 7,49% al 12,49% TIN, pero para que entiendas cuál sería su coste real, te damos un ejemplo: imagina que quieres comprar un coche híbrido de segunda mano que cuesta 18.000 euros y que tu plazo de devolución ideal es de 96 meses. En este caso, Cetelem te aplicaría un TIN del 7,49%, con una comisión del 2,5% que pagarías al contado. Con estos datos, pagarías una cuota de 249,82 euros al mes y terminarías abonando un total de 5.982,72, más 450 euros por la comisión de apertura.

Préstamo Fintonic
Fintonic pone a disposición del cliente préstamos personales para pedir entre 2.000 y 50.000 euros sin exigir ningún tipo de vinculación: es decir, no tendrás que cambiar de banco ni contratar ningún producto adicional para poder contratar sus ofertas. En cuanto a su precio, los préstamos personales de Fintonic están disponibles a partir del 3,9% TIN (y hasta un 17,95% TIN, dependiendo del perfil del cliente y del tipo de operación). Para que te hagas una idea, si pidieras 30.000 euros a devolver en 60 meses, con un interés del 7,95% TIN, acabarías devolviendo 36.626,34 euros: es decir, pagarías 6.626 euros en concepto de intereses.