El aplaudido consejo que el Papa Francisco dio a todas las parejas del mundo: “Hagan las paces antes de que termine el día”
Papa Francisco
“La guerra fría del día siguiente es peligrosa“”, dijo el Papa en una entrevista
El Papa Francisco durante la proclamación de nuevos santos de la Iglesia Católica en la Jornada Mundial de las Misiones 2024,
Jorge Mario Bergoglio, más conocido como el Papa Francisco, ha sido una de las figuras más cercanas y humanas del Vaticano en los últimos tiempos. Su estilo directo, cálido y profundamente empático ha conectado con personas de todo el mundo, creyentes o no. A lo largo de su pontificado, no solo habló de fe y doctrina, sino también de temas cotidianos, como las relaciones de pareja.
Uno de sus consejos más recordados y compartidos —especialmente tras su reciente fallecimiento— es una lección de vida para cualquier relación: “Peléense todo lo que quieran, con tal de que hagan las paces antes de que termine el día.”
Una frase sencilla que encierra una gran verdad
En una de sus intervenciones más comentadas, el Papa abordó con naturalidad y sabiduría el tema de las discusiones en pareja. Su mensaje era claro: las peleas son normales, incluso inevitables, cuando se convive con otra persona, pero lo verdaderamente importante es no dejar que los conflictos se alarguen ni se enraícen en el orgullo.
Según Francisco, lo peligroso no es el enfado en sí, sino lo que viene después: el silencio, la distancia emocional y la llamada “guerra fría del día siguiente”. En sus propias palabras: “La guerra fría del día siguiente es peligrosa.”
La importancia de reconciliarse y pedir perdón. El Papa no solo instaba a resolver los conflictos rápidamente, sino que también ponía en valor la humildad de pedir perdón. Para él, mantener una relación saludable pasaba por saber dar el primer paso, bajarse del pedestal del ego y reencontrarse con el otro antes de que el día termine.
Un mensaje tan simple como profundo, que ha trascendido el ámbito religioso para convertirse en una guía emocional para muchas personas. En tiempos de comunicación fugaz y relaciones marcadas por la inmediatez, sus palabras invitan a mirar a la pareja con más compasión y menos orgullo.
Una lección de humanidad más allá de la religión
Lejos de los discursos moralistas o teóricos, este consejo refleja la esencia del Papa Francisco: un líder espiritual que nunca dejó de ser también un observador de lo humano. Su cercanía y sentido común lograron que muchos encontraran consuelo y guía en sus palabras.
Y como él mismo decía, con esa mezcla de sabiduría y calidez que le caracterizaba: “No se vayan a dormir sin haber hecho las paces.”