Muere a los 24 años la actriz Sophie Nyweide, embarazada y en extrañas circunstancias
Investigación abierta
La interprete alcanzó la fama en edad temprana tras participar en películas como 'Bella' o 'Mamut'
Sophie Nyweide en una foto en su perfil social de Facebook
La actriz estadounidense Sophie Nyweide, conocida por sus papeles durante su infancia en películas como Mamuto Bella, fue hallada sin vida el pasado 14 de abril a los 24 años. Según han revelado las autoridades a TMZ, su cuerpo era encontrado en la orilla de un río Vermont (Bennington), cerca de una estructura improvisada hecha con ramas.
Además, el certificado de defunción de la intérprete revelaba este miércoles que la intérprete estaba embarazada en el momento de su muerte, la cual ha tenido lugar en circunstancias que aún continúan siendo investigadas por la policía local, ya que se cree que la joven había estado acompañada por otras personas en el momento de su deceso.
Ante los hechos, las autoridades no descartan la posibilidad de que el suceso se haya perpetuado en un acto delictivo o consecuencia de una sobredosis accidental, ya que Nyweide tenía problemas con las drogas, tal y como ya confirmó su madre tiempo atrás para la revista People.
Ha sido la propia familia de la artista, quien ha hecho pública la triste noticia sobre su fallecimiento a través de una publicación en las redes sociales. “Soñaba (más bien exigía) ser actriz, sin saber que su madre también lo era. Lo hizo con una facilidad que todos admirábamos. Parecía más feliz en un set de cine, convirtiéndose en otra persona. Era un lugar seguro para ella”, ha escrito.
Sophie Nyweide en 'Mamut' (2009)
Éxito en edad temprana
Nyweide comenzó su carrera en el cine a los seis años con la película Bella (2006) y participó en otras producciones destacadas como Margot y la boda (2007) y Una señal invisible (2010). Aunque su fama se catalpultó con sus interpretaciones en Mamut (2009) y Noé (2014) , la actriz decidió alejarse del foco público durante sus últimos años.
“”Sophie era una chica amable y confiada. A menudo, esto la dejaba vulnerable a que otros se aprovecharan de ella. Escribía y dibujaba con voracidad, y gran parte de su arte refleja su profunda profundidad y también el dolor que sufrió. Muchos de sus escritos y obras de arte son guías de sus luchas y traumas. Incluso con esas guías, diagnósticos y sus propias revelaciones, sus allegados, además de terapeutas, agentes del orden y otras personas que intentaron ayudarla, están desconsolados porque sus esfuerzos no pudieron salvarla de su destino. Se automedicó para lidiar con todo el trauma y la vergüenza que albergaba, lo que resultó en su muerte. Repitió repetidamente que lo superaría sola y se vio obligada a rechazar el tratamiento que posiblemente podría haberle salvado la vida.
Sophie. Una vida que terminó demasiado pronto. Que no sea en vano. Que todos aprendamos de su breve vida en la tierra y nos vaya mejor. Sí, todos debemos proteger a nuestros hijos y hacerlo mejor”, reza el obituario publicado en Internet por su entorno intímo, el cual ha solicitado además, donacionesen nombre de Nyweide para, una asociación que lucha por las víctimas de violencia sexual.