Los niños salen con hambre del comedor de sus colegios. Es una queja de las familias y las AMPAs que se lleva repitiendo durante años a las puertas de muchos centros educativos de Ի岹ܳí. Denuncias que se han puesto en conocimiento de las entidades oportunas en multitud de ocasiones pero que, a menudo, han caído en saco roto, aunque no ha sido así por esta vez. La Junta ha reconocido, tras una denuncia de FACUA-Ի岹ܳí interpuesta en octubre, que Mediterránea de Catering, la empresa que gestiona el mayor número de comedores en la región, ha ofrecido “insuficiente cantidad” (de hasta un 30%) en sus menús en dos centros, en concreto en el CEIP Juan de Mena, en Córdoba, y en el CEIP La Motilla de Dos Hermanas, en Sevilla.
FACUA se hacía eco entonces de las quejas de las familias y socios de las AMPA de ambos colegios y denunciaba la situación, lo que obligó a la administración regional a hacer inspecciones extraordinarias y por las que ha determinado que, efectivamente, Mediterránea estaba incumpliendo lo establecido en el Plan EVACole, un programa a través de cual se determina la variedad y la cantidad de comida que los niños deben percibir para llevar una alimentación saludable y equilibrada.
La Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Junta ha reconocido que ha detectado «no conformidades» en los menús escolares que Mediterránea de Catering sirve en diferentes centros educativos de la comunidad autónoma, detectando cantidades insuficientes de alimentos, con reducciones de hasta un 32% con respecto a lo requerido, tamaño inadecuado de las raciones servidas o problemas en el control efectivo del tamaño de las porciones. También ha señalado la falta de comunicación adecuada a las familias sobre el consumo real de alimentos por alumno, condiciones ambientales inadecuadas debido al ruido excesivo durante las comidas o incumplimientos relacionados con el sistema de control de aceptación y rechazo de los alimentos servidos. De este modo, en sus evaluaciones extraordinarias concluye que el servicio de comedor del CEIP Juan de Mena de Córdoba y CEIP La Motilla de Dos Hermanas «requiere seguimiento», destacando la necesidad de implementar mejoras significativas que corrijan todas las deficiencias detectadas.
Un sistema de control “fallido”
“Es una situación sumamente grave y preocupante”, ha señalado a este periódico Rocío Bejínez, miembro de la Junta directiva de CODAPA (Confederación Andaluza de Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado por la Educación Pública), quien denuncia que “el sistema de gestión y control” por parte de la administración regional hacia las empresas de catering “no funciona” y los “perjudicados son nuestras hijas y nuestros hijos” que “pasan hambre” porque no se cumple con el “pliegue de prescripciones” técnicas de la Agencia de Educación. En este caso en concreto, las familias venían denunciado una deficiente prestación del servicio desde hacía tiempo, tal y como señala FACUA en un escrito. Así alertaban de aspectos como insuficiencia de los menús, la falta de adaptación de los mismos, la baja calidad de la comida servida, el incumplimiento reiterado del pliego de condiciones e incluso la dificultad que encuentran a la hora de poner una reclamación contra la empresa.
Consideramos que la empresa ha actuado de manera dolosa porque conoce sus obligaciones”
“Ha habido una falta de fiscalización por parte de la administración”, insiste Bejínez, “estamos hablando de una empresa que obtiene millones por llevarse la licitación para gestionar los comedores en muchos de los centros escolares públicos de Ի岹ܳí, que conoce perfectamente cuáles son sus obligaciones” y ha optado “por engañar al alumnado, a las familias e, incluso, a la propia administración recortando cantidades de comida que pone en el plato”. “Seguramente”, ha proseguido, Mediterránea de Catering “tendrá una sanción económica, pero consideramos que ha actuado de manera dolosa porque conoce sus obligaciones” y, aún así, han actuado de esta manera, reduciendo cantidades de comida “para obtener beneficios”.
Para CODAPA, este es el gran problema: dejar la gestión de los comedores en manos de cuatro grandes empresas privadas, con servicios externalizados y buscando su beneficio, mientras que los alumnos se convierten en clientes.
Según un informe de la ONG Justicia Alimentaria, en Ի岹ܳí hay más de 2.000 comedores en centros educativos públicos atendiendo a más de 211.000 usuarios, la mayoría de ellos (1.445 comedores) son servicios externalizados, es decir, a manos de estas empresas privadas que han obtenido la licencia durante dos años por valor de más de 200 millones de euros. Es decir, el 84% del servicio es privado, y la tendencia es que los centros que cuentan con su propio comedor dependiente de la Junta y que cuenta con la supervisión del propio colegio, siga desapareciendo. Para la entidad, esta gestión privada contradice el propio manual de la Junta de Buenas Prácticas para la compra de alimentos ecológicos, locales y de temporada, de acuerdo a la economía circular y a prevención del despilfarro. En este sentido se pronuncia también Rocío Beníjez, quien considera que la pequeña y mediana empresa no puede optar a estas licitaciones dejando fuera de la ecuación el mercado de proximidad.
Se plantea una denuncia conjunta por irregularidades desde otras AMPA de la comunidad
Este reconocimiento por parte de la Junta de la escasez de alimentos en estos dos centros educativos puede dar pie, y lo dará con casi total seguridad, a nuevas denuncias por la misma vía por parte de AMPAs y familias de otros colegios, tanto de los gestionados por Mediterránea de Catering como de las otras tres grandes empresas. Sólo así, sospechan, se asegurarían las inspecciones de los menús que los niños y niñas almuerzan a diario en sus colegios.
De hecho, CODAPA ha señalado que se ha planteado por parte de otras AMPAs y familias la posibilidad de realizar una denuncia conjunta a través de FACUA para denunciar la posible deficiencia del servicio en otros puntos después de que, en muchos casos, “están cansados de trasladar la situación a la administración sin tener respuesta”. El caso Mediterránea podría ser sólo la punta de un iceberg que los padres no están dispuestos a dejar pasar por la salud de sus hijos.
¿Cómo funcionan las empresas de catering en los colegios?
Según se apunta desde CODAPA, son las propias empresas las que se autorregulan y presentan informes a la Agencia Pública de Educación, pero por parte de la Consejería no existe un número determinado de auditorias a realizar. Son los técnicos de la Federación quienes se encargan de realizar estos exámenes a medida que van surgiendo los problemas, “pero no son suficientes”. “El sistema no funciona”, insiste Beníjar, quien insiste en que “no tratamos de criminalizar estos servicios” ya que las familias están a favor “de que existan comedores” pero bajo unas premisas de “calidad” y que cumpla con el Plan EVACole.
Lo que sí está detallado es la manera de proceder: las empresas deben suministrar los alimentos una o dos veces por semana a los centros en furgonetas refrigeradas, y nunca pueden dejar la comida en las cámaras frigoríficas durante el fin de semana. Luego, los menús se distribuyen de manera individual en barquetas de plástico que son introducidas en los hornos para su regeneración.