La poblaci贸n de cotorra argentina (Myiopsitta monachus), una especie ex贸tica procedente de Am茅rica del Sur de la familia Psittacidae (loros o papagayos) de plumaje verdoso y de tonos grises en el pecho, se est谩 disparando y desplazando desde las grandes ciudades a fincas de frutales, huerta y vi帽a provocando da帽os en los cultivos.
La Instituci贸 Catalana d鈥橢studis Agraris (ICEA) y la Fundaci贸 Agr铆cola Catalana han advertido sobre los da帽os causados por especies ex贸ticas y sobre los riesgos ecol贸gico y econ贸mico y reclaman una respuesta coordinada y preventiva en Catalunya.
Tras colonizar el 谩rea metropolitana, se est谩 extendiendo a fincas de frutales, huertas y vi帽as
Desde 1980, solo en Barcelona, su presencia ha pasado de ser testimonial a convertirse en un problema: de los menos de 50 ejemplares registrados en 1980 se ha pasado a m谩s de 5.500 en 2024, con una clara concentraci贸n en el Eixample, Gr脿cia y Ciutat Vella. En Catalunya, el censo supera los 16.000 ejemplares. Compite con especies aut贸ctonas como las urracas o los estorninos, da帽a el arbolado urbano por la construcci贸n de nidos masivos y empieza a ser una amenaza para algunos cultivos.
El bi贸logo Jordi Baucells, ponente en la jornada de ICEA y la Fundaci贸 Agr铆cola Catalana sobre especies ex贸ticas, considera que 鈥渓a cotorra argentina es un caso paradigm谩tico de c贸mo una especie ex贸tica puede adaptarse y alterar el equilibrio ecol贸gico rbano en pocas d茅cadas鈥�. Seg煤n sus datos, los da帽os en cultivos en Catalunya m谩s considerables se limitan al Parc Agrari del Baix Llobregat, donde anualmente se organizan acciones de caza controlada. 鈥淐omo est谩 en expansi贸n 鈥揳grega鈥�, est谩n comenzando a apreciarse da帽os en vi帽as del Baix Pened猫s y en frutales del Alt Empord谩鈥�. Desde su punto de vista, es urgente tomar medidas.
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La especie est谩 en toda el 谩rea metropolitana de Barcelona y se extiende a Tarragona y el Empord脿 y con m谩s lentitud a la Catalunya interior. Al tratarse de especie invasora. la ley de biodiversidad exige un plan de gesti贸n y de erradicaci贸n. 鈥淟as actuaciones de gesti贸n ya llegan tarde, vamos diez a帽os tarde鈥�, sostiene Baucells. 鈥淓n Sant Cugat y en Sabadell 鈥揳帽ade鈥� hay decenas y decenas de nidos en fincas privadas. Este es el gran problema porque en estos casos los costes de gesti贸n, las autorizaciones y los procedimientos se complican mucho鈥�.