Suena el despertador. Una mujer se levanta con cara agotada, resignada, por tener que ir al trabajo. En la oficina la reciben con una tarta: es su último día como funcionaria de la Agencia Tributaria ya que tiene previsto prejubilarse. Pero su jefe no quiere decirle adiós y quiere que sea la encargada de investigar un caso mediático: la posible evasión fiscal de una estrella de la música latina llamada Celeste.
“Si eres capaz de demostrar que el año pasado estuvo más de 184 días en España, pueden ser más de 20 millones de euros”, le advierte. “Es la inspección que siempre nos imaginamos”. Y, cómo no, el público puede encontrar un referente directo para este punto de partida: el caso de Shakira, que en noviembre de 2023 llegó a un acuerdo con la fiscalía porseis cargos ante el juez por evasión de impuestos.