En la b煤squeda del apoyo de la cr铆tica, a finales de la d茅cada de los 2000 empezaron a producirse comedias dram谩ticas con puntos de partida rompedores y mujeres protagonistas: Nurse Jackie听(que vuelve) sobre una enfermera adicta, United States of Tara sobre una madre con trastorno de personalidad m煤ltiple o The Big C donde Laura Linney ten铆a un c谩ncer terminal. Dying for Sex, que estrena este viernes, parece de esa hornada televisiva de Estados Unidos.
Se inspira en la historia de Molly Kochan, una mujer que dej贸 a su marido despu茅s de recibir un diagn贸stico terminal. En un podcast cont贸 c贸mo sent铆a la necesidad de explorar su sexualidad antes de morir. Michelle Williams se mete en la piel de la mujer, que muri贸 en 2019 a los 45 a帽os.
Michelle Williams se mete en la piel de Molly Kochan, que al recibir un diagn贸stico terminal dej贸 al marido para tener sexo con otras personas y lo cont贸 en un podcast
Pero, al compararla con esas comedias, debe reconocerse la mejor铆a.听Las creadoras Kim Rosenstock y Elizabeth Meriwether entienden, para empezar, que una comedia necesita ser divertida. Lo es. Y, sobre todo, no se creen ingeniosas o provocadoras por el punto de partida (como s铆 hac铆an las predecesoras) para abordar con naturalidad y comprensi贸n cada decisi贸n de la protagonista.
Dying for Sex ofrece elementos para diseccionar mientras se mueve entre el chiste y la crudeza del diagn贸stico: c贸mo una mujer puede infravalorar su propio placer, c贸mo la persona que quieres tener a tu lado en el momento de tu muerte puede ser tu amiga y no tu marido, c贸mo cambia la percepci贸n de la vida cuando tienes una fecha de caducidad a la vista.
Michelle Williams, con Jenny Slate de mano derecha, transmite el drama, la liberaci贸n y esa b煤squeda a la que nunca se debe renunciar. Despu茅s de Fosse/Verdon, quiere su segundo Emmy.