¿Tienes preguntas sobre nutrición? Envíanoslas a comer@lavanguardia.es, nuestro nutricionista Aitor Sánchez resolverá todas tus dudas.
¿De verdad es beneficiosa la miel de pueblo? (Rosa Camacho, lectora)
Hola, Rosa.
Existe un halo de salud alrededor de la miel muchas veces exagerado, ya que la mayoría de propiedades medicinales que se le atribuyen no se cumplen en la realidad. Solo tenemos algunas pequeñas evidencias de cómo puede tener efectos antibacterianos con uso tópico (en la piel), y un ligerísimo efecto beneficioso con algunas infecciones del tractor respiratorio. Nada que pueda convertirlo en el superalimento que muchas veces escuchamos.
La miel es en su mayoría ú y, como tal, tenemos que considerarla como ú libre que añadimos a nuestras infusiones o preparaciones. Asumir que estamos aportando mucho nutricionalmente con una cucharada de miel sería autoengañarnos, por mucho que sea preferible tomar miel al ú blanco.

La miel cruda es más interesante queaquella tratada térmicamente
Realmente la cantidad de micronutrientes que hay en la miel es muy pequeña y no vale la pena pagar todo el peaje de ú libre para conseguirlo.
Preguntas específicamente por la miel de pueblo, no existe una denominación como tal, pero sí que puedo desarrollar un poco acerca de la miel cruda. La miel cruda es aquella que no se cuece ni se filtra, estos procesos se hacen para que sea mucho más homogénea y no tenga esos tropezones y partículas en suspensión que a veces vemos en una miel más artesanal.
Este tipo de miel, la cruda, es más interesante que la miel tratada térmicamente, pero aun así debemos seguir considerándola como una fuente de ú. Que sea mejor, no la convierte en algo de lo que podamos abusar.
¿Cuánto tiempo duran los yogures una vez han alcanzado la fecha de consumo preferente? (Hector Macías, lector)
Hola, Héctor.
Como muy bien señalas, los yogures tienen fecha de consumo preferente, eso quiere decir que no caducan y que, por lo tanto, una vez pasada su fecha solo tendríamos una pérdida de propiedades organolépticas. Es posible que haya diferencias en el sabor, el olor o el color, pero no necesariamente tiene que haber una proliferación de bacterias patógenas que nos ponga en peligro. Aspecto que sí sucede con muchos otros alimentos que tienen fecha de caducidad.
De este modo no hay peligro en tomarnos un yogur que ha superado la fecha de consumo preferente, siempre y cuando hayamos realizado una inspección de sentido común.

Los yogures tienen fecha de consumo preferente
Debemos fijarnos en que no se haya alterado en exceso ni haya sufrido alteraciones debidas a que el envase lleve mucho tiempo desatendido, al igual que descartar que se haya dañado porque se ha abierto la tapa, haya recibido algún golpe o haya perdido la cadena de frío.
Si no presenta alteraciones visuales como el crecimiento de hongos, ni cambios en el sabor o el olor, sí podemos consumirlo.
Hay que tener en cuenta que esto es posible gracias a que el yogur es el producto resultante de una fermentación láctica por parte de las bacterias que siguen vivas en él. Esta fermentación genera un medio ácido (por el ácido láctico) en el que no pueden proliferar las bacterias patógenas que podrían causarnos una toxiinfección.