La cuota no lo es todo en una hipoteca: todos los gastos que hay que tener en cuenta
Finanzas
La cuota es solo el inicio: conoce todos los gastos adicionales de una hipoteca, desde comisiones hasta impuestos y seguros

La cuota no lo es todo en una hipoteca: todos los gastos que hay que tener en cuenta

El precio de los préstamos hipotecarios que se ofrecen en España cada vez es más bajo, gracias a los recortes de tipos practicados por el Banco Central Europeo durante los últimos meses. Según los datos publicados por el Banco de España, el interés medio de las hipotecas para vivienda concedidas en diciembre de 2024 fue del 2,90%; sensiblemente inferior al de las otorgadas un año antes (3,78%).
Gracias a esta rebaja, ahora es posible firmar un préstamo hipotecario con una cuota más asequible. Ahora bien, eso no significa necesariamente que sea barato contratar uno de estos productos: según los analistas del comparador financiero HelpMyCash.com, para no hay que tener en cuenta solo la mensualidad, pues hay otros gastos que pueden encarecer significativamente su precio.
El interés y la cuota
Desde el comparador reconocen, sin embargo, que el interés es una parte fundamental del precio de una hipoteca. Principalmente, porque cuanto más bajo sea, más baratas serán las cuotas a pagar por el titular del préstamo, dado que las mensualidades de estos productos se calculan a partir del importe prestado por el banco, del plazo de devolución y del tipo aplicado.
Un ejemplo práctico permite hacerse una idea de la importancia del interés en una hipoteca. Pongamos que una persona necesita 150.000 euros a devolver en 25 años. Con un tipo del 2,5%, y excluyendo otros gastos, pagaría unas cuotas de 673 euros y devolvería un total de 201.877 euros al banco. Pero con un interés del 3%, las mensualidades serían de 711 euros y el total a devolver ascendería a 213.395 euros; 11.518 euros más.

Por este motivo, los analistas de HelpMyCash aconsejan tratar de conseguir una hipoteca con el interés más bajo posible. Asimismo, recomiendan para calcular cuánto se abonaría con cada oferta y asegurarse de no dedicar más del 30% de los ingresos netos al pago de las mensualidades, que es la ratio máxima de endeudamiento recomendada por el Banco de España.
Los productos asociados
Ahora bien, desde HelpMyCash alertan de que el interés que ofrecen la mayoría de los bancos tiene truco, porque está rebajado (bonificado) a cambio de contratar varios productos suyos. Y estos servicios asociados pueden costar dinero, como los seguros, los planes de pensiones o las tarjetas, así que hay que incluir su coste en el precio final de la hipoteca.
La, por ejemplo, tiene un interés desde el 2,50%, que es uno de los más bajos del mercado.

No obstante, para conseguirlo hay que contratar una cuenta con una comisión de mantenimiento trimestral de 60 euros, un seguro de hogar de 12,99 euros al mes, uno de vida de 63,38 euros al trimestre y uno de protección de pagos de 415,66 euros al año, según su propia página web. Por todo ello, si se piden 150.000 euros a 25 años, habrá que devolver un total de unos 228.504 euros.
En cambio, la , una marca online de Bankinter, tiene un interés más alto: desde el 2,69%.

Pero para conseguirlo solo hay que abrir la Cuenta Nómina, No-Nómina o Profesional de Bankinter, que no tiene comisión de mantenimiento y contratar un seguro de daños con cualquier compañía, cuyo coste orientativo es de unos 167,96 euros al año. Para el ejemplo anterior, el total a devolver sería de unos 210.409 euros; unos 18.095 euros menos que el préstamo del Sabadell.
Todas las comisiones
Más conocidas, pero no por ello menos importantes, son las comisiones. La más temida por los futuros hipotecados es la de apertura, que se paga al formalizar la escritura ante notario. Su coste suele ser de entre el 0,25% y el 1% sobre el importe de la hipoteca, aunque desde HelpMyCash aseguran que la inmensa mayoría de los bancos ya no la incluyen en la letra pequeña de sus ofertas hipotecarias.
En cambio, sí incluyen otras comisiones que se aplicarán en caso de llevar a cabo ciertas operaciones: la de amortización anticipada, que hay que pagar si se devuelve dinero al banco por adelantado; la de novación, que se cobra si se modifican las condiciones de la hipoteca a posteriori mediante un cambio con el banco; la de subrogación de acreedor, aplicada en caso de cambiar el préstamo hipotecario de banco…

Por eso, al valorar ofertas hipotecarias, los analistas del comparador aconsejan leer detenidamente la letra pequeña de cada una para saber qué bancos cobrarán estas comisiones y cuál podría ser su coste. Asimismo, recomiendan negociar con las entidades para que las eliminen del contrato en caso de que apliquen alguna y, también para que rebajen su interés o asocien menos productos a la hipoteca.