Un triplete de Kylian Mbappé, con sus tantos en los minutos 4, 33 y 61 ante el Manchester City (3-1) certificaron la clasificación del Real Madrid para los octavos de final de la Champions. Y el hundimiento del proyecto del Manchester City que deberá regenerarse. Buscar nuevos objetivos. Nada es para siempre y Guardiola lo sabe mejor que nadie. Le costó verbalizarlo. Pero lo hizo en el Santiago Bernabéu. Sonó humilde. También resignado. Su equipo solo ha ganado tres partidos de diez disputados en esta nueva Champions. Dos en casa y uno fuera ante el Bratislava. Con todo, en el estreno de la nueva Champions el Manchester City ha terminado ocupando la plaza número 22. Del todo insuficiente para estar en los octavos de final. Fin de ciclo.
“Ha ganado el mejor Real Madrid con el que nos hemos cruzado en estos últimos años. Por su posesión, por su capacidad de correr, defender bien. Por muchas razones hemos perdido la consistencia este curso. Y nosotros no tenemos ese ritmo”, reconocía Guardiola. Las cifras estremecen a cualquiera. Son 13 derrotas las que suma el Manchester City en una temporada para olvidar. Una cifra inédita para un entrenador que, en 17 años de carrera en los banquillos, nunca se había topado con una situación así.