La decisión de Pedro Sánchez de aunar en una misma intervención las comparecencias que el conjunto del arco parlamentario le venía reclamando para informar tanto del apagón eléctrico del pasado 28 de abril como de su plan de defensa y seguridad ha obligado a sus socios de investidura a trenzar discursos ambivalentes.Intervenciones en las que se han entremezclado reproches y apoyos, casi a partes iguales, dependiendo de la materia en cuestión.
Algo que, a pesar de permitirle al presidente del Gobierno disimular parcialmente su falta de respaldo al proyecto de rearme europeo, no le ha servido para exhibir una unidad parlamentaria firme en su respuesta al cero energético y en su defensa de un proyecto basado en las energías renovables que ponga fecha al fin de las centrales nucleares.

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, camina hacia su escaño pasando delante del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez
La portavoz de Sumar, Verónica Martínez Barbero, ha sido la encargada de abrir el fuego amigo entre socios. La diputada confederal ha sido clara en su oposición a que el Gobierno del que forma parte multiplique el gasto nacional en lugar de adaptar un “plan nacional de racionalización del gasto” en defensa, tal y como viene reclamando la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.
“No aceptamos el dogma de incrementar el gasto militar hasta alcanzar cifras arbitrarias de porcentaje del PIB. La seguridad europea no puede construirse mediante la compra compulsiva de armamento (…) lo que se necesita es una evaluación rigurosa de las amenazas reales y una estrategia defensiva basada en la cooperación europea”, ha espetado Barbero a Sánchez en materia de defensa.
Un verbo afilado que, acto seguido, se ha reservado para PP y Vox por su constante campaña de “bulos para alentar el caos”. Porque en materia energética, Sumar se ha puesto del lado del PSOE para la investigación del apagón aunque ha tratado de empujar a los socialistas hacia una red eléctrica “100% pública, eficiente y resiliente” que impida que “el suministro eléctrico de todo un país dependa de decisiones empresariales orientadas al beneficio privado”.

La portavoz de Sumar, Verónica Martínez Barbero
Gabriel Rufián ha recogido el testigo en la tribuna de oradores. Y, centrándose en el debate energético, ha lamentado que las intervenciones de unos y otros hayan versado más sobre dinero e ideología que sobre energía y tecnología. Motivo por el que ha acusadoa PP, Vox y Junts de estar al servicio del lobby nuclear por haber reaccionado al apagón apostando por ampliar la vida útil de las centrales nucleares españolas.
El portavoz de ERC sostiene que el cero energético del pasado lunes obedece a la “avaricia de un oligopolio eléctrico salvaje y privado”. Pero de ello ha culpado parcialmente al Gobierno porno estar actuando “de manera firme para imponer el interés general al sector energético”. Y dado que Sánchez ha decidido juntar los dos debates en una misma comparecencia, Rufián ha propuesto al presidente del Gobierno que dedique la partida económica del rearme a recuperar el 80% de Red Eléctrica Española que ahora está en manos privadas. “De repente ustedes tienen 10.000 millones de euros para armamento cuando recuperar el control de REE saldría por 8.000 millones... son lentejas”, ha señalado el dirigente de Esquerra.
Miriam Nogueras, por su parte, ha entremezclado argumentos energéticos y militares para configurar un discurso duro y crítico contra el Gobierno al que apenas le ha concedido un respiro.La portavoz de Junts ha reprochado a Sánchez que aún no se conozcan las causas del apagón y lamentado que el gobierno que preside siga sin ser capaz de garantizar los servicios mínimos de Rodalies cuando, por contra, realiza “inversiones millonarias en Madrid”.Por eso le ha recordado que, como su formación ha venido haciendo en todas y cada una de las negociaciones y debates abiertos en lo que va de legislatura, los diputados de Junts “no estamos de su lado, sino del de Catalunya”.
Así le ha reiterado que solo apoyará el millonario plan de defensa si el 20% del montante se destina a las empresas e industrias catalanas. Al tiempo que ha aprovechado el apagón eléctrico para denunciar “el apagón democrático” que, a su juicio, sufre el nacionalismo catalán desde hace décadas y del que ha culpado parcialmente al PSOE y, por extensión, al actual president de la Generalitat, Salvador Illa (PSC) por no hacer lo suficiente para “revertirlo”.

La portavoz parlamentaria de Junts, Miriam Nogueras, atiende la intervención del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde su escaño
Mertxe Aizpurua ha formalizado el apoyo de EH Bildu al Gobierno de coalición para avanzar en el “desmantelamiento” de las nucleares al tiempo que ha abogado por la “recuperación completa del control público” del sector eléctrico. Pero, del mismo modo, ha asegurado que el rearme militar defendido por el PSOE es un “error mayúsculo”.
Y el PNV se ha centrado en reclamar al presidente del Gobierno más precisión sobre los fondos para el rearme y más certezas ante el apagón. “La seguridad y la energía son objeto de debates incómodos, pero no podemos mirar hacia otro lado. Necesitamos más certidumbres respecto a lo ocurrido durante el apagón para no dejar espacio a la desinformación y los bulos, y más concreción sobre el origen de los fondos que se destinarán a defensa para garantizar que no conllevarán recortes sociales”, ha señalado la nueva portavoz del grupo vasco, Maribel Vaquero.
Ione Belarra, por su parte, no ha disimulado la confrontación absoluta que mantiene con el Ejecutivo de un tiempo a esta parte. Y desde las primeras líneas de discurso ha aseverado la comparecencia de Sánchez “va a quedar registrada en una de las páginas más oscuras de la historia de nuestro país” por ”imponer un régimen de guerra “en un país que siempre ha militado en la paz”.