A menudo muchas personas utilizan expresiones o realizan actos con los que, sin darse cuenta, menosprecian la figura de la mujer o la sitúan en una posición de inferioridad respecto a los hombres. Es el caso de los micromachismos, un término que describe “comportamientos, prácticas y estrategias cotidianas con las que se ejerce el poder de dominio masculino y que atentan en diversos grados contra la autonomía de las mujeres”, según la definición de la
La expresión “micromachismo” fue creada en 1991 por Luís Bonino Méndez, un psicoterapeuta especializado en temas de género, para referirse a actos enmarcados en la llamada “violencia blanda”. El término servía para englobar aquellas expresiones que intentan dejar a las mujeres en un nivel inferior, ya sea en situaciones cotidianas, en el trabajo o en el ámbito deportivo, entre otros.