Disfrutar de un buen vino no significa dejarse el sueldo en botellas carísimas ni tener un título de sumiller. Con algunos trucos sencillos, puedes sacar lo mejor de cualquier vino y elevar tu experiencia sin gastar una fortuna. Aquí te contamos cinco secretos que los expertos aplican y que tú también puedes empezar a usar desde hoy.
La copa sí importa
No necesitas una colección de copas de cristal de lujo, pero sí elegir una adecuada para cada tipo de vino. Unas copas de cristal fino con forma de tulipa ayudan a concentrar los aromas y mejoran la experiencia. Si solo puedes tener un tipo, opta por copas universales, que funcionan bien tanto para tintos como para blancos.
Truco extra
Sujeta la copa por el tallo para evitar calentar el vino con las manos y alterar su temperatura.
Sujeta la copa por el tallo para evitar calentar el vino con las manos y alterar su temperatura.
Uno de los errores más comunes es beber el vino a una temperatura incorrecta. Aquí tienes una guía rápida:
- Blancos y rosados: entre 8 y 12 ºC (guárdalos en la nevera y sácalos unos minutos antes de servir).
- Tintos jóvenes: entre 12 y 16 ºC (puedes meterlos en la nevera 15-20 minutos antes de beber).
- Tintos con cuerpo: entre 16 y 18 ºC (demasiado fríos pierden aroma, demasiado calientes saben pesados).
Truco extra
Si un vino está demasiado caliente, mételo en un cubo con agua y hielo durante 5-10 minutos. Enfriará de forma homogénea sin pasarse.
Decántalo (aunque no sea un gran reserva)
Muchos vinos, incluso los jóvenes, mejoran con un poco de aireación. Si no tienes un decantador, simplemente abre la botella unos 20-30 minutos antes de servir o viértelo en una jarra ancha para que respire.
Truco extra
Si tienes prisa, puedes airear el vino sirviéndolo en la copa y dándole un leve giro para liberar los aromas.
No escatimes en el descorche
El tipo de sacacorchos que uses puede marcar la diferencia. Los modelos básicos de dos tiempos (los que usan los camareros) son ideales para extraer los corchos sin esfuerzo. Evita los sacacorchos de mariposa o de rosca, que pueden romper el corcho y arruinar la experiencia.
Truco extra
Si el corcho se rompe, filtra el vino con un colador de café o una servilleta fina para evitar residuos.
El maridaje hace magia
No necesitas vinos caros para disfrutar de un buen maridaje. La clave es combinar intensidades:
- Platos ligeros → vinos frescos y suaves (blancos, rosados o tintos jóvenes).
- Platos potentes → vinos con más cuerpo (tintos con crianza, blancos fermentados en barrica).
Truco extra
Si dudas, apuesta por vinos espumosos o rosados, que combinan con casi todo y aportan frescura.
Bebe mejor sin gastar más
Disfrutar del vino como un experto no tiene por qué ser complicado ni costoso. Con estos pequeños cambios, cualquier botella –desde un vino de supermercado hasta una etiqueta especial– puede mejorar notablemente. Y lo mejor es que puedes ponerlos en práctica hoy mismo.
¿Listo para probar estos trucos en tu próxima copa? ¡Salud!