¿Tienes preguntas sobre nutrición? Envíanoslas a comer@lavanguardia.es, nuestro nutricionista Aitor Sánchez resolverá todas tus dudas.
Si abro un bote de lentejas, no me lo acabo, lo guardo en la nevera y, al cabo de los días, la superficie se oscurece… ¿Debo tirarlas o me las puedo comer? (MarioGiménez, lector)
Ese oscurecimiento de la superficie no es el que nos debe marcar que tenemos que descartar el bote de lentejas. La aparición de ese color se debe al pardeamiento y la oxidación del producto, que cuando entra en contacto con el aire se vuelve marrón.
Algunos fabricantes para evitar este proceso le añaden un antioxidante, normalmente se usa EDTA, que retrasa la aparición del coloreado. No obstante, es solo una modificación de color y una pequeña pérdida de nutrientes, no entraña riesgo por sí sola.

Lentejas con costilla
Lo que debe determinar si hay que tirar un bote de lentejas abierto es el tiempo que lleve en la nevera, independientemente de que se haya pardeado o no. Puede darse el caso de que unas lentejas lleven una semana en el frigorífico y no haya cambiado el color porque tienen algún antioxidante en la formulación, o que otras lentejas ya se hayan oscurecido en tan solo unas horas.
Como este cambio de color no está relacionado con la proliferación de bacterias, tenemos que seguir igualmente las instrucciones del fabricante que aparecen en el etiquetado, concretamente las que dicen “una vez abierto consumir antes de x horas”.
Hola, Aitor. ¿Qué pasa si nunca como vacuno? Gracias (Jorge Expósito, lector)
No debería haber ningún problema por no consumir, ya no solo un alimento en concreto, sino un grupo de alimentos, siempre y cuando obtengamos esos nutrientes a partir de otros alimentos.
Por ejemplo, hay personas que son alérgicas a los frutos secos y, por tanto, no pueden tomarlos, pero no presentan ningún déficit siempre y cuando obtenga esos mismos nutrientes a partir de aceites vegetales o de semillas.
El caso que tú nos presentas es más concreto todavía, porque no es que una persona no coma carne, lo cual no tendría que presentar ningún problema ni riesgo, sino que simplemente no puede consumir un tipo concreto de carne. Por lo que sería todavía más sencillo sustituir ese alimento.
La carne es conocida por ser una buena fuente de hierro y proteínas, y esos mismos nutrientes los podemos encontrar en legumbres, pescados, huevo…

Carne picada de vacuno
Lejos de presentar un riesgo, la carne roja es un grupo de alimentos a limitar, por lo que representaría todavía menos un hándicap para la salud.
Si podemos construir una alimentación saludable, incluso teniendo que retirar alimentos saludables, imagínate con aquellos que son de consumo ocasional. Todavía más sencillo.