Alegría contenida. ھó para octavos conseguida con brillantez pero nadie se atrevió a dibujar una sonrisa completa. Se viven horas tensas en el Barça, incluso goleando al Barbastro en la Copa. La situación de Dani Olmo y Pau Víctor está demasiado presente en el vestuario azulgrana como para que una victoria la aparque. “Tenemos un poco de mal gusto por los compañeros pero esperamos que el club resuelva el asunto”, instaba Ronald Araújo, que completaba en tierras aragonesas su primer partido desde la temporada pasada tras recuperarse de una operación en el bíceps izquierdo.
Si uno de los capitanes devolvía la pelota al tejado de Laporta, no era menos Hansi Flick, que situaba el foco aún con más fuerza en la cúpula barcelonista. “Necesitamos a Dani Olmo y Pau Víctor, tengo la confianza de que el club lo conseguirá. He hablado con ellos y quieren ayudarnos”, confesaba el preparador alemán al respecto. A pesar de todo, el técnico no considera que todo lo que está sucediendo haya afectado a su equipo: “Todo el mundo los quiere de vuelta, son muy importantes, pero hemos sabido estar concentrados y hemos jugado como queríamos. Somos profesionales y se ha visto que no nos ha afectado”.
Flick
“Araújo ha podido jugar los 90 minutos y eso es muy bueno pero debemos ir con cautela”
A Flick se le notaba en la sala de prensa que no tenía demasiadas ganar de hablar del asunto ni tampoco del partido. Sí hizo un aparte para valorar el regreso precisamente de Araújo. “Ha podido jugar los 90 minutos y eso es muy bueno pero debemos ir con cautela. Es uno de los capitanes y es una figura importante también dentro del vestuario, nos congratula tenerle de vuelta”, subrayaba el entrenador del Barça.
De vuelta a las declaraciones de Araújo, el uruguayo valoró muy positivamente el partido. “El equipo ha hecho un gran papel en una cancha difícil, pero entramos muy concentrados y hemos podido sacarlo adelante”, se congratulaba ante las cámaras de Movistar.
Sobre su estado físico, el uruguayo admitió que “no sabía si iba a jugar los 90 minutos, pero el míster me ha ido preguntando cómo me sentía y estaba bien”.