Hace años que Aitana Bonmatí (Sant Pere de Ribes, 1998) compite con ella misma. Para poder ganar Balones de Oro. Pero, sobre todo, para levantar títulos con el Barcelona, el club de su vida. Este año, el Barça ya ha ganado la Supercopa de España, una final que el equipo conquistó ante el Real Madrid en Leganés (5-0). También goleó al conjunto blanco en las semifinales de la Copa de la Reina con un 8-1 en el global de la eliminatoria. En Valdebebas, en la primera vuelta de la Liga F, venció 0-4. Y hoy si se imponen en el clásico liguero estarán más cerca de conquistar su décima Liga. Sería la sexta consecutiva. La cita merece toda la atención. Y por ello el club ha abierto el Estadi Olímpic Lluís Companys (12h). Se espera que unos 30.000 espectadores presencien el 19.º clásico femenino que juegan ambos clubs.

Aitana Bonmatí con sus dos Balones de Oro
Los 18 anteriores han caído del lado barcelonista, líder destacado de la Liga con 63 puntos, siete más que el conjunto blanco, segundo en la tabla cuando quedan dos meses de competición. Aitana llegó puntual al Johan Cruyff. No le gusta alterar sus rutinas. Quizás esa sea la clave de su éxito. Se levanta en su Ribes natal, donde reside, y desayuna. Desde hace tres años, sus hábitos nutricionales han cambiado. Es flexitariana por convicción. Es decir, no come carne. Para ser competitiva ha conseguido sustituir la proteína de la carne y reorganizar el plan nutricional con su propio nutricionista para suplir el déficit proteico que le podía generar ese cambio.
También están muy pendientes los servicios nutricionales del club, parcela que lidera Mireia Porta. Esta decisión la tomó antes de ganar los dos Balones de Oro. Mal no le ha ido. Después de entrenar y de las sesiones de gimnasio, vuelve a casa para comer. Tiene también un nutricionista personal que ha llegado a contratar a cocineros para que le preparen una cena adecuada a sus necesidades. Todo para mejorar y optimizar el tiempo de una jugadora que llegó al Barcelona en el 2002 en edad juvenil con grandes aspiraciones.
Desde hace tres años, la centrocampista del Barcelona es flexitariana
Ahora, con 27 años, su agenda está de lo más controlada. Para beneficiar su descanso y su desconexión, ella y su equipo fijaron hace un año que, como máximo, podía asumir un acto comercial a la semana. Porque la marca Aitana también se ha expandido. Dejó Nike y fichó por Adidas. Y actualmente, también es la imagen de Revlon, Bimbo, Alpro, Nissan, EA Sports, Topps y Vueling. Vendrán más. Especialmente le ilusiona el campus de verano que realiza en Ribes, su oasis de tranquilidad. Donde lee, va al psicólogo, visita a sus padres o queda con la gente de siempre. Estos elementos han sido imprescindibles para evolucionar.

Aitana Bonmatí es la nueva imagen de Vueling
Contra el Wolfsburgo, en la ida de los cuartos de final de la Champions, hizo uno de los mejores partidos de la temporada. Porque en escenarios grandes, Aitana se crece. “Creo que donde realmente se ve la calidad del equipo y de las jugadoras es en los partidos grandes. Allí puedes desarrollar todas las facetas del juego durante 90 minutos”, reivindica la centrocampista, que se siente mucho más decisiva en la Champions porque “en la Liga nos encontramos en un contexto diferente. Hay muchos bloques bajos. Esto impide que haya más espacios entre líneas. Seguramente por eso marcamos más goles centrando y rematando”, diagnosticaba.
El Real Madrid No es un equipo débil. Ha ganado al Arsenal, eliminó al City y ha competido contra el Chelsea. Hay que poner en valor lo que hacemos"
Después está el Real Madrid. “No es un equipo débil. Ha ganado al Arsenal, eliminó al City y ha competido contra el Chelsea. Si el Madrid logra competir ahí, significa que está a la altura. Por eso quiero poner en valor nuestro trabajo y nuestras victorias”, reivindica una Aitana que, como con los anteriores técnicos, también ha conectado muy bien con Pere Romeu, entrenador que se fija más en los pequeños detalles para que pueda seguir compitiendo contra ella misma. Disfrutando especialmente con Graham Hansen. Ambas han convertido el costado derecho del Barça en una apisonadora. Con todo, Aitana ya suma nueve goles este curso.“Y en este tramo final, es cuando mejor me encuentro”, apuntaba con una sonrisa antes de mirar el reloj. Ya le tocaba empezar a entrenar.