Los 21 de mayo serán siempre un día negro para el FC Barcelona. El día que se cumplía un año de la dolorosa derrota ante el Lyon en la final de la Champions de Turín, las de Jonatan Giráldez encajaban su primera derrota en Liga desde hacía casi dos años. Un doblete de Kundananji sentenció a un conjunto blaugrana más pendiente de la final de la Champions del próximo 3 de junio, que de una Liga sentenciada matemáticamente desde hace varias jornadas. El gol de Alexia, el primero desde su lesión, no bastó para evitarlo (2-1).
Con el título ya asegurado, el único objetivo de Giráldez era que nadie se hiciese daño a dos semanas para el duelo ante el Wolfsburgo y repartir minutos entre las futbolistas para llegar en las mejores condiciones. Tampoco se pudo cumplir esta meta pues Oshoala tuvo que retirarse con molestias musculares cuando tan solo se habían disputado 17 minutos de partido.