La implantación de renovables en Catalunya acelera, pero no lo suficiente. La potencia instalada de energía verde en la comunidad autónoma creció un 2,57% el año pasado, tres veces menos que en el conjunto de España (+9,3%), según los datos de Red Eléctrica Española (Redeia) en el 2024. En total, la comunidad autónoma tiene 3.723 MW instalados y operativos entre energía hidráulica, fotovoltaica y eólica.
Catalunya es una de las comunidades autónomas con mayor potencia instalada, con 12.059 MW, gracias a la capacidad de las centrales de ciclo combinado, que representan el 31% del total, y a las tres centrales nucleares de ó I, ó II y Vandellòs II (25,2%). Sin embargo, el conjunto de las renovables solo representan una tercera parte del total, con una potencia que sitúa a la comunidad como el séptimo territorio por capacidad, por detrás de Castilla-León, Ի岹ܳí, Castilla-La Mancha, Extremadura, Aragón y Galicia. Además, casi la mitad de su potencia procede de centrales hidráulicas como las de Sallent, Riba-roja o Tavascan, todas ellas de Endesa.
Catalunya apenas representa el 4,8% de la generación de energía renovable del conjunto de España
Los últimos datos de la Generalitat muestran que Catalunya tiene 1.406 MW de eólica en servicio, mientras que en energía fotovoltaica la cifra es de 67 MW (estos datos no cuentan el autoconsumo). En cartera, el Departament d’Energia tiene autorizados 38 MW de eólica y 2.048 MW en solar, mientras que en tramitación, la cifra asciende a 659 MW y 1.100 MW, respectivamente. La Generalitat apunta en el documento Prospectiva energètica de Catalunya (Proencat) que el objetivo es alcanzar una potencia de 5.000 MW de energía eólica y de 7.000 MW de fotovoltaica en el 2030.
“En el último año se han puesto en marcha 78 MW de proyectos que llevaban en tramitación muchos años”, explica Víctor Cusí, uno de los portavoces del Observatori de les Energies Renovables de Catalunya y de la patronal EolicCat. El empresario reconoce que existe voluntad por parte de la Generalitat, pero los resultados de momento no llegan. “Tenemos sobre todo problemas para conseguir la aprobación medioambiental y la aprobación urbanística, pero en general todo el proceso es muy lento”, comenta. Un ejemplo claro es la declaración inicial de tramitación de proyecto, el primer paso, cuyo proceso se puede demorar hasta ocho meses.
Cusí propone que el área de Energia cuelgue directamente de Presidència. “Necesitamos tener una visión interdepartamental para acelerar los plazos, así como sería un paso adelante crear una secretaría general”, comenta. Además, apunta que es necesario reforzar en efectivos el cuerpo funcionarial para tramitar los expedientes.
En el 2024, Catalunya generó7.160 GWh de energía renovable. Se trata de un crecimiento del 18,6% respecto al año pasado, por encima de la tasa del conjunto de España, que fue del 10%, gracias al fuerte impulso de la hidráulica. Las fuertes lluvias de los meses de primavera permitieron el incremento de este tipo de energía, que se encontraba en mínimos tras tres años de sequía. Sin embargo, la generación de renovables catalana apenas representa el 4,8% del total de España.
España es una potencia en renovables con un 56,8% de capacidad procedente de energías limpias. En el último año se instalaron 7.000 MW de fotovoltaica y eólica en el país, una cifra que supondría duplicar la actual potencia de renovables en Catalunya, hasta sumar 85.144 MW. Este alza se produce pese a que el sector se encuentra en un momento de frenazo por la inestabilidad de los precios mayoristas, una situación que castiga la rentabilidad de los proyectos.
La demanda de energía creció en España un 0,9%, hasta alcanzar los 248.811 GWh, aunque lejos de la demanda precovid. Pero Redeia destaca que esta tasa rompe una racha de dos años consecutivos a la baja. El incremento de electricidad va ligado al crecimiento de la economía española, una de las que más aumentan en el contexto europeo, pese a desafíos como la guerra de Ucrania o la dana en Valencia.
El autoconsumo, referente
Pese a que el desarrollo de las energías renovables no avanza a buen ritmo, Catalunya sí es un referente en el desarrollo del autoconsumo fotovoltaico. Los últimos datos de cierre del ejercicio de E-distribución, la filial especializada de Endesa que controla cerca del 98% de la red en la comunidad autónoma, muestran un crecimiento de 25.000 nuevos suministros vinculados a placas solares, un 27% más, hasta alcanzar un total de 119.400 clientes. En total, el autoconsumo superó los 1,3 GW de potencia instalada, lo que supone un crecimiento de casi el 20% respecto al año anterior. La potencia instalada supone un 17% de la conectada en toda España. Fuentes del sector energético apuntan a las facilidades administrativas para poner en marcha este tipo de infraestructuras. Los datos más actualizados sobre la implantación de autoconsumo en España son del 2023. La patronal española fotovoltaica UNEF señaló que a cierre de ese ejercicio la potencia instalada en el país se situó rozando los 7 GW. El objetivo del Plan Nacional Integrado de Աí y Clima (Pniec) es alcanzar una potencia instalada de autoconsumo de 30 GW. El sector considera que se trata de una meta alcanzable.