Solo una semana después de una breve hospitalización por los efectos secundarios de su tratamiento contra el cáncer que le obligó a cancelar varios compromisos, el rey Carlos III ha mostrado su cara más amableuniéndose a una orquesta vegetal durante una recepción en el castillo de Windsor la noche del jueves. El monarca de 76 años asistió al encuentro, junto a unos 350 invitados, cuyo objetivo era reconocer a voluntarios que participan en la música comunitaria en el Reino Unido.
El momento más vistoso de la cita fue cuando el rey se unió a la London Vegetal Orchestra, un grupo de músicos que utilizan hortalizas para componer melodías y que se publicita como la única agrupación del Reino Unido que ofrece al público espectáculos “de cosecha propia”.Carlos III aprendió in situ a soplar a través de unazanahoria cortada que emitía un sonido similar al de una flauta e interpretó junto al grupo a ritmo de Twinkle, twinkle, little star.