Cerró 2024 por todo lo alto: su gira 1+ 1 son 20 lo vendió todo allá donde iba recalando y en diciembre llenó el último de los recintos (el madrileño Teatro Caixabank Príncipe Pío) con un público totalmente entregado. Fran Perea (Málaga, 1978) lanza nuevo disco, El hombre invisible, con un single adelanto dedicado a su padre: Bala perdida, una canción compuesta tras fallecer su padre y que habla de la imprevisibilidad de la vida, de sobreponerse a los golpes que da la vida y de cómo quien se va, deja muchas veces un camino que seguir: el videoclip ilustra tan bien lo que el artista cuenta y siente que el mensaje se entendería incluso sin necesidad de subir el volumen.
Producido por su propia compañía
El videoclip ilustra tan bien lo que el artista cuenta que se entendería incluso sin necesidad de subir el volumen
Como sus paisanos Antonio Banderas y Paco León, Fran es un artista multidisciplinar: es conocido como actor y cantante, pero además de componer sus propios temas, desde hace diez años participa de la empresa gestora de los Teatros Luchana y Pavón de Madrid –que acaba de cumplir un siglo– creó su propia compañía (Feelgood Teatro) y ahora ha vuelto a invertir en el sello NBL Música, al que se ha sumado su hermano pequeño, Víctor Elías. Y desde este miércoles, 9 de abril, hasta el día 20, estará en los Teatros del Canal con la obra El efectojunto a Alicia Borrachero, Elena Rivera e Itzan Escamilla.
Apasionado de la lectura y la música, mi padre tuvo que buscarse la vida al margen de lo que permitía el régimen
Bala perdida es una canción que habla de sobreponerse a los golpes que te da la vida, de la resiliencia y de la familia. En suma, es un homenaje a tu padre. Cuéntame cómo era él.
Era un tío fantástico, una de esas personas que dejan huella. Tuvo que luchar en una época dura: apasionado de la lectura y sin posibilidad de encontrar los libros que quería tuvo que buscarse la vida, lo mismo con la música al margen de lo que se estilaba o permitía el régimen. Era profesor e hizo mucho por la educación pública, creó la ONG La Liga para reivindicar la cultura popular, puso una segunda (INCIDE) que sigue en marcha… Esos valores nos los transmitió a mí y a mi hermana, Maite, y a mucha otra gente: sigo recibiendo mensajes de personas que lo recuerdan con mucho cariño porque dejó huella allá donde dio clases.
En este primer single vemos también la luz de un faro que marca el camino para seguir y los colores cielo y mar que nos llevan a vuestra Málaga natal.
Muchas veces el motor que te hace seguir adelante es el mensaje y la energía de esa persona que se ha ido. Mi padre era un hombre que disfrutaba de la vida y la canción también habla de eso: tras la pérdida, echar a volar, perseverar y vivir el día a día como hacía él. El faro que se ve en el disco representa el camino que me ha dejado iluminado.
Tu padre falleció el 17 de enero de 2023, a los cinco días de que estrenases en Madrid Retorno al hogar. La función se suspendió un día y volviste a las tablas. Muchos actores en la misma situación han asegurado que salir al escenario les ayudó a sobrellevar el dolor.
Yo también lo he escuchado muchas veces y me preguntaba qué haría llegado el caso. Y me tocó vivirlo. Bajé rápidamente a Málaga y al día siguiente regresé para actuar. No pasó por mi cabeza otra cosa. También te digo que habría suspendido más días si lo hubiera necesitado: afortunadamente, cuento con la suerte de tener una hermana que se hizo cargo de muchas cosas y yo pude volver para no dejar colgada a una serie de gente, el teatro con las entradas vendidas, etc. Y mis compañeros me cuidaron muchísimo.
Creo que quienes me conocen coinciden en que soy buena gente y eso me hace sentir bien

Este miércoles, 9 de abril, hasta el día 20, estará en los Teatros del Canal con la obra El efecto, junto a Alicia Borrachero, Elena Rivera e Itzan Escamilla.
En El hombre invisible, los personajes que has interpretado en tu carrera asumen el control y alzan la voz para describir a la persona. La ventaja de ser actor es poder vivir muchas vidas y el hándicap, que alguno de tus personajes puede comerte, ante el espejo o ante el público. Bien, Bela Lugosi pidió ser enterrado vestido de Drácula.
(Risas) No hay tanto peligro de que uno se lo crea como de que el personaje o la imagen te fagocite. Eso a veces ocurre y tú te sientes un poco invisible: yo no soy Marcos Serrano, soy Fran. De hecho, no tengo nada que ver con ese personaje; hago un trabajo de interpretación. El disco tiene que ver con eso: yo desaparezco para que hablen mis personajes y cómo a veces la obra vuelve invisible al artista. Cuando estaba creando el disco también pensaba en qué puedo aportar que me diferencie de otro músico y como también soy actor, pensé en el espectáculo, en cómo integrar esta curiosa dicotomía.
El espectáculo… No es baladí el asunto en una época en que ni Taylor Swift podría vivir de vender discos.
Así es. El negocio en la industria hoy está en el directo. Las plataformas han democratizado mucho la música pero lo han cambiado todo para nosotros. Lo que percibe el artista es… un mojón (risas).
Dejando al artista y yendo a la persona, ¿cómo crees que te describirían quienes te conocen?
Mmm… Bueno, creo que coinciden en que soy buena gente. Una persona con buen corazón, currante… Y eso me hace sentirme bien. Creo que genero buen ambiente por donde voy y que de eso trata la vida, estar cómodo y feliz con la gente que te rodea.

Portada de 'El hombre invisible', su séptimo disco.
Cerraste la gira 1+1 son 20 volviendo a llenar el recinto, en ese caso, el Teatro Caixabank Príncipe Pío.
Esa gira ha sido preciosa: dos años de ir llenando salas, dando conciertos… En año y medio dimos cuatro en Madrid y agotamos entradas. Espectacular. Esa gira nos ha dado muchas alegrías y ganas de continuar, que de eso se trata, y también nos ha permitido estar un poco más tranquilos para preparar el disco y otros proyectos, que estas cosas hay que financiarlas y lo hacemos nosotros. Además, nos ha permitido crecer con el sello NBL Música, fichar a algunos artistas, Víctor Elías se ha sumado también y así podemos dedicar más tiempo a más cosas interesantes.
¿Te cansa que te pregunten por Los Serrano en cada entrevista?
(Risas) No, no, para nada. Hombre, sí me puede fastidiar un poco, digámoslo así, que si me hace la entrevista por el nuevo disco me preguntes por él 10 minutos y 40 por Los Serrano. Pero no ocurre en realidad. Me preguntan por Los Serrano, claro, pero luego vamos a lo demás.
¿Qué fue para ti lo más emocionante de la boda de tu hermano pequeño, Víctor Elías?
Que Víctor y Ana depositaran en mí el enorme honor de casarlos, pues yo fui el maestro de ceremonias. Uf, fue un reto enorme pero precioso. Verles las caras en ese momento e intentar que el mundo girase para ellos.
Llevas tu vida privada de un modo tan discreto que pocos saben que te casaste hace dos años con la actriz Luz Valdenebro.
Intento ser muy discreto con mi vida: sé que soy un personaje público pero por mi profesión, no por cómo o con quién vivo. Y así me conduzco. Es una grandísima actriz y además, como persona, hace honor a su nombre.
¿Contratarías a tu esposa para una obra de teatro o es mejor no mezclar vida privada con la profesión?
(Risas) ¿Ves? Ya me estás preguntando por la vida personal y eso no me mola (risas).
Repregunto: como productor que eres, ¿no has pensado en contratar a Luz Valdenebro, una actriz muy buena y que yo te recomiendo?
(Risas) Ehm… Sí, hombre, sí. Con el tiempo uno aprende a separar lo personal de lo profesional. Claro que sí (risas).