Donald Trump aún no está en la Casa Blanca y ya están surgiendo algunas disensiones dentro de su coalición, concretamente entre Elon Musk y figuras conservadoras con posturas contrarias a la inmigración. El apoyo del magnate a los trabajadores extranjeros ha provocado la reacción de partidarios del movimiento MAGA -Make America Great Again-, preocupados por un posible impulso a lasvisas H1-B, que permiten a las empresas traer trabajadores extranjeros con habilidades específicas a Estados Unidos.
Seguidores de Trump, como la activista de ultraderecha Laura Loomer, la comentarista conservadora Ann Coulter y el exrepresentante Matt Gaetz, han criticado a Musk y el también multimillonario Vivek Ramaswamy, designados por Trump paradirigir una comisión para recortar el gasto gubernamental.

Donald Trump y Elon Musk observan una pelea durante UFC 309 en el Madison Square Garden de Nueva York
Elon Musk, oriundo de Sudáfrica y que había obtenido esta visa para trabajar en EE.UU., es un ferviente defensor de la posibilidad de utilizar mano de obra extranjera cualificada.El hombre más rico del mundo, que se ha convertido en un aliado cercano y partidario financiero de Donald Trump, declaró el jueves en su plataforma X que “traer al 0,1% superior de talentos de ingeniería a través de la inmigración legal es esencial para garantizar que Estados Unidos siga ganando” en el escenario internacional.