Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, muchos buscan desconectar de la ciudad para disfrutar de los días festivos rodeados de naturaleza y tranquilidad. Son fechas ideales para descansar y viajar con la familia o amigos. Las opciones son infinitas, aunque no hace falta coger un avión o cruzar el charco para disfrutar de paisajes de película. España cuenta con una gran variedad de destinos turísticos, gastronómicos y culturales que enamoran a todo aquel que los visita, tanto a locales como a extranjeros.
En el corazón de la Costa Blanca existe un paraíso con encanto brasileño y aguas mediterráneas. El diario The Mirror lo ha señalado como el favorito de los británicos y ha asegurado que sus playas son parecidas a las de Río de Janeiro. Hablamos de Calpe, situado en la provincia de Alicante, en la Comunidad Valenciana. En su costa se alza el Peñón de Ifach, uno de los símbolos más reconocibles de la Costa Blanca y de todo el litoral alicantino.

Playa de Ipanema, Rio de Janeiro, Brasil.
Esta impresionante formación rocosa de caliza blanca se eleva 332 metros sobre el nivel del mar y se encuentra conectada a tierra firme por un istmo. Su forma recuerda al famoso Pan de Azúcar de Río de Janeiro, y es una de las razones por las que se compara a este municipio con la ciudad brasileña. El Peñón no solo es un atractivo para turistas, sino también para biólogos, ecologistas y amantes de la naturaleza. En 1987 fue declarado Parque Natural, por su gran valor ecológico: en sus laderas y acantilados viven más de 300 especies de plantas, así como numerosas aves marinas. Las vistas desde arriba son espectaculares y, si el cielo está despejado, se puede observar una panorámica de Ibiza. Se puede subir con precaución por un sendero señalizado que pasa por un túnel excavado en la roca.

Peñón de Ifach
Otro de los grandes encantos de Calpe, que provoca la multiplicación de su población cada verano, es su impresionante costa de más de 13 km, salpicada de playas de arena dorada y calas de aguas turquesas. La Playa del Arenal, sin duda, es una de las favoritas. Con más de un kilómetro de arena y aguas cristalinas, ofrece el espacio perfecto para relajarte o recorrerla a tu ritmo. Al estar situada en el casco urbano, es la playa más concurrida, pero también la mejor equipada, con todos los servicios a tu disposición. Además, cuenta con accesos adaptados para personas con movilidad reducida.

La emblemática Muralla Roja, creada por el arquitecto R. Bofill
Para quienes buscan un lugar de paz y serenidad, la Cala Manzanera es el refugio perfecto. Ideal para bucear, hacer snorkel, pescar o simplemente tomar el sol, esta cala de piedras ofrece un ambiente tranquilo, perfecto para parejas, familias o amigos que desean conectar con la naturaleza. Aunque el acceso al agua requiere el uso de escarpines o calzado adecuado, la experiencia vale la pena. Además, la cala está situada justo bajo la Muralla Roja, una impresionante obra arquitectónica de Ricardo Bofill que se integra de manera sublime con el paisaje. Este icónico lugar también fue inspiración para la famosa serie El Juego del Calamar.
A pesar de que, en verano, Calpe es uno de los lugares más concurridos de la Costa Blanca, The Mirror recomienda visitarla “fuera de los meses de verano”, debido a sus aglomeraciones. El medio afirma que, en temporada baja, la temperatura sigue siendo relativamente suave, lo que permite que los viajeros sigan disfrutando de la playa y los otros atractivos turísticos de la región.