Tras el fango baja la avalancha de fake news, que aumentan la indignaci贸n y la tornan en ira. Ataques meteorol贸gicos de Marruecos, pantanos destruidos, una monta帽a de muertos en el t煤nel de Alfafar y el parking de Aldaia, una riada despistada en el mapa, armer铆as atracadas, beb茅s supervivientes sin padre ni madre鈥 鈥淣o hag谩is caso, hay mucha intoxicaci贸n para que haya caos鈥, intentaba razonar el Rey entre los vecinos de Paiporta. No hace falta inventar. La realidad que est谩n viviendo los vecinos de Catarroja, La Torre, Sedav铆, Chiva鈥 supera lo imaginable f铆sicamente y digerible mentalmente.

Efectivos de la UME y del cuerpo de Bomberos extraen agua del parking subterr谩neo del Centro Comercial Bonaire, en Aldaia听
Cada ciudadano con su m贸vil es corresponsal de su verdad, luego est谩 la dudosa veracidad de algunos relatos construidos en las redes y hasta en algunos medios con m谩s ganas de audiencia que responsabilidad. Un autodenominado 鈥渞evolucionario de la libertad鈥 con un micr贸fono y una c谩mara de televisi贸n no es un notario de la realidad. Si como a Rub茅n Gisbert, reportero de Iker Jim茅nez, te pillan embarr谩ndote los pantalones para entrar en directo en el programa de televisi贸n, la v铆ctima no solo es la verdad, son los vecinos, que ven c贸mo se trivializa su desgracia.