Si la semana pasada la ministra de Defensa, Margarita Robles, abrió la puerta a que tropas españolas participaran en una eventual misión de paz en Ucrania, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha alejado este lunes esta posibilidad al considerar que la paz “sigue estando muy lejos”.
“España es un país que está firmemente comprometido con la paz y cuando hay misiones, tanto de la Unión Europea como de la Alianza Atlántica, no regatea esfuerzos”, indicó Robles el pasado jueves a la prensa en los márgenes de la cumbre de ministros de Defensa que se celebró en Bruselas.“Si finalmente la UE o la Alianza Atlántica decidieran que hay una misión de paz, España estudiaría este tema, porque lo importante es el compromiso que nosotros tenemos con la paz”, remarcó.
“Nadie plantea el envío de tropas a Ucrania, porque la paz sigue estando muy lejos”, ha señalado esta mañana el jefe de la diplomacia española en una entrevista en Onda Cero, en la que ha pronosticado que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, piensa seguir avanzando con su “guerra de agresión”.
En este sentido, Albares ha sostenido que la forma más rápida de alcanzar una verdadera paz, que “no sea simplemente un alto el fuego”, es mantener la ayuda a Ucrania para que se defienda de la agresión rusa, sobre cuyo fin se ha mostrado muy pesimista.“No veo una paz en el horizonte, aunque una de las reflexiones es cómo ayudar a que esa paz llegue lo antes posible. El día que se plantee la paz, tenemos que ver de qué paz estamos hablando”, ha añadido el ministro, quien ha defendido la importancia de la cumbre convocada este lunes en París por el presidente francés, Emmanuel Macron, sobre la guerra en Ucrania y los desafíos de la seguridad en Europa en la que asiste el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
La reunión de París
A su juicio, la reunión debe servir para “evidenciar la unidad de los europeos” en torno a “qué debemos hacer en adelante para garantizar que habrá paz justa y duradera en Ucrania lo antes posible y analizar y decidir qué necesitamos los europeos para poder alcanzar esa paz justa para seguir ayudando a Ucrania a ganar la paz, y para la seguridad europea y protección a nuestros ciudadanos “.
”No diría que esta reunión es una respuesta a Múnich“, ha afirmado Albares en alusión a la Conferencia de Seguridad de Múnich celebrada este fin de semana, en la que la administración estadounidense de Donald Trump confirmó su intención de dejar de lado a los europeos en un eventual proceso de paz que ponga fin a la invasión rusa de Ucrania, que está a punto de cumplir tres años.
Albares ha defendido las relaciones transatlánticas entre Estados Unidos y la Unión Europea basadas en el diálogo, respeto mutuo e igualdad, pero ha subrayado que Europa tiene la capacidad, la voluntad y los instrumentos para poder ”tomar en mano“ su propia seguridad y destino.

Albares ve "impensable" aumentar a corto plazo el gasto militar que exige EE.UU.
Y, en este sentido, cree evidente que ”una guerra de agresión no puede tener un premio“. ”No podemos incentivar a otros a lanzarse a guerras de agresión“, ha dicho.Ha querido dejar claro así que ”una guerra de agresión tiene que terminar con una paz justa, una paz que encaje dentro de la Carta de las Naciones Unidas y, sobre todo, una paz que sea duradera, no que sea simplemente un parón para que alguien vuelva a reencontrar fuerzas y volverse a lanzar de nuevo a otra guerra".