Es posible que, cuando Angela Merkel calculaba cuál sería su legado, pensara en su condición de mujer más poderosa del planeta: en un mundo de hombres, el de los presidentes y primeros ministros, ella destacaba como cancillera de Alemania. Ella sabrá hasta qué punto se enorgullece de sus políticas austeras. Pero difícilmente podía imaginar que, después de abandonar el cargo político en 2021 tras 16 años en el poder, habría quienes la recordasen como una detective de asesinatos.
El tema no es que la alemana pase sus ratos libres resolviendo homicidios como si fuera Jessica Fletcher de vacaciones: ella ha estado ocupada en lobbies conservadores de su país o escribiendo unas memorias que se publicarán en noviembre. Sin embargo, una serie de televisión sí se la ha querido imaginar en este papel y, ahora que el canal italiano RAI tiene previsto emitir la producción, este retrato ficticio levanta ampollas. ¿Cómo se puede ridiculizar de esta forma a Angela Merkel, precisamente de carácter sobrio, inventando toda una carrera posterior como detective?