Casi una de cada cinco personas que juega a videojuegos pertenece al colectivo LGBTQ. Así lo confirma el último informe publicado por GLAAD, una organización fundada en 1985 para defender los derechos de las personas homosexuales, bisexuales, trans y – ahora también – queer.
El dato concreto es que un 17% de las personas que juegan pertenecen al colectivo LGBTQ. Hay un crecimiento de un 7% respecto a un estudio publicado hace tres años, que situaba la cifra entorno al 10%. Esto contrasta con la representación que las personas del colectivo tienen dentro de los videojuegos: un 2% en el catálogo de Xbox, PlayStation y Nintendo Switch y un 2,5% en Steam.