Las espinacas son ricas en fibra y tienen mucho betacaroteno y vitamina C, lo que equivale a un buen aporte de antioxidantes, que contribuyen a prevenir enfermedades. También contienen ácido fólico, ideal para las embarazadas.
Espinacas con bacalao y bechamel
Ingredientes
1 kg de espinacas frescas
250 g de bacalao desmigado desalado
4 huevos
200 ml de leche entera
40 g de harina
Queso rallado
Aceite de oliva virgen extra
Sal
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1. Limpia bien las espinacas y trocéalas.
2. Cuece los huevos durante 10 minutos. Refresca bajo el grifo de agua fría, pela y corta en rodajas. Reserva.
3. Pon a calentar un par de cucharadas de aceite en una cazuela amplia y cocina el bacalao a fuego lento. Retira y reserva.
4. En la misma cazuela, rehoga las espinacas durante 4-5 minutos. Salpimienta.
5. Reparte las espinacas en la base de una fuente apta para el horno previamente engrasada. Añade encima el bacalao.
6. Para la bechamel: pon a calentar un poco de aceite en una cazuela, agrega la harina y rehógala bien removiendo con unas varillas. Vierte la leche poco a poco sin dejar de remover. Salpimienta y cocina durante 10 minutos aproximadamente hasta que espese.
7. Reparte las rodajas de huevo encima de las espinacas con bacalao y cubre con la bechamel.
8. Espolvorea con queso rallado y gratina en el horno. Retira y sirve.