Cuando todav铆a no era presidente de Argentina, Javier Milei dec铆a que el Fondo Monetario Internacional (FMI) era una 鈥渋nstituci贸n perversa鈥� que 鈥渘o deber铆a existir鈥�.
Pero ha cambiado de opini贸n.
Ahora que ocupa la Casa Rosada y se enfrenta a problemas financieros, el l铆der ultraderechista ha acudido sin dudarlo a los brazos de este organismo. Esta madrugada, el FMI anunci贸 que su equipo t茅cnico ha llegado a un acuerdo con el Gobierno argentino para un pr茅stamo de 20.000 millones de d贸lares.听
El paquete de rescate 鈥揹el que se desconocen los detalles y que todav铆a tiene que ser aprobado por la junta ejecutiva del FMI, la cual presumiblemente se reunir谩 este viernes鈥� ser谩 un bal贸n de ox铆geno para un pa铆s que ve c贸mo menguan de forma alarmante sus reservas de divisas al mismo tiempo que el mundo se ve envuelto en la guerra comercial iniciada por Donald Trump.
El pr茅stamo, solicitado el pasado mes de diciembre, permitir谩 a Milei seguir adelante con su programa econ贸mico, centrado en contener la inflaci贸n y el d茅ficit fiscal. Un plan que el propio FMI avala en el comunicado emitido para anunciar el acuerdo t茅cnico, donde se destacan 鈥渓os impresionantes avances iniciales鈥� del Gobierno argentino 鈥渆n la estabilizaci贸n de la econom铆a鈥�.
鈥淓l anuncio ha llegado en un momento en el que el Gobierno estaba ya con el agua al cuello para hacer frente a los vencimientos de deuda que se vienen y al problema del , aumentado por las turbulencias que han causado los aranceles de Trump鈥�, explica a este diario Anna Ayuso, investigadora del Barcelona Centre for International Affairs (CIDOB) experta en Am茅rica Latina. 鈥淓s una buena noticia, porque adem谩s parece ser que el FMI desembolsar谩 una cantidad importante de dinero desde el principio鈥�: la Casa Rosada aspiraba a recibir de entrada el 40% del cr茅dito, y todo apunta a que ver谩 satisfecha su demanda.
Sangr铆a de divisas
En los 煤ltimos d铆as, el Banco Central de Argentina se ha desprendido de cerca de 1.400 millones de d贸lares
En paralelo al acuerdo con el FMI, Argentina tambi茅n est谩 negociando otros pr茅stamos con el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, entre otros organismos internacionales.听Todos estos fondos deber铆an ir destinados a reforzar las reservas del Banco Central argentino, que han ca铆do hasta niveles cr铆ticos. En los 煤ltimos d铆as, esta instituci贸n se ha desprendido de cerca de 1.400 millones de d贸lares para intentar sostener el tipo de cambio. La incertidumbre entre los inversores sobre el futuro de la econom铆a nacional ha disparado la demanda de la moneda estadounidense, lo que ha incrementado el riesgo de una brusca devaluaci贸n del peso.
Milei ya hace semanas que asegura que, con la inyecci贸n millonaria del FMI, Argentina tendr谩 capacidad para eliminar las restricciones a la compra y venta de divisas (el denominado cepo cambiario). Eso permitir铆a impulsar las exportaciones, atraer inversi贸n extranjera y aliviar la presi贸n sobre las reservas, pero tambi茅n podr铆a disparar la apreciaci贸n del d贸lar y desencadenar una fuga de capitales y un aumento de la inflaci贸n. Aunque el Gobierno ha evitado concretar un calendario para aplicar esa medida, es posible que Milei, espoleado por el FMI, la ejecute antes de las pr贸ximas elecciones legislativas, que se celebrar谩n en octubre. 鈥淩etirar el cepo es riesgoso鈥�, dice Ayuso, 鈥減ero si sale bien es una baza electoral鈥�.
Largo historial
Argentina es el pa铆s que m谩s compromisos ha firmado con el FMI, convertido en su mayor acreedor individual
Esos comicios ser谩n un test para la popularidad de un presidente que, con el nuevo paquete de ayuda, inscribir谩 su nombre en una tradici贸n de largo recorrido: el pr茅stamo anunciado la pasada madrugada ser谩 el acuerdo n煤mero 29 de Argentina con el FMI. Es el pa铆s que m谩s compromisos ha firmado con el organismo financiero. El primero lo suscribi贸 en 1958, durante la presidencia de Arturo Frondizi, con el objetivo de estabilizar el problema cambiario y frenar la inflaci贸n, e implic贸, entre otras medidas, recortes en el sector p煤blico y la privatizaci贸n de empresas estatales. Aquel fue el inicio de una relaci贸n atravesada por gobiernos de todos los signos (incluido el de la dictadura militar de Jorge Videla en los setenta) y graves crisis financieras (la m谩s traum谩tica, la del corralito del 2001).
Esa historia tormentosa ha hecho que un amplio sector de la poblaci贸n argentina recele del FMI, convertido en el mayor acreedor individual del pa铆s y sin贸nimo de dolorosos programas de ajustes que, hasta hoy, nunca han tenido un final feliz.
