La decoración del hogar dice mucho sobre cómo son las personas que habitan en ella, ya que, en cierto modo, se trata de una manera de expresar la personalidad, los gustos y las necesidades de cada cual. Además, el interiorismo también cumple una función destacada a la hora de diseñar espacios que transmitan tranquilidad y bienestar, en los que sentirse cómodo y poder refugiarse del estrés diario. De hecho, la decoración es capaz de influir en las emociones de las personas, hasta el punto de generar incomodidad o, por el contrario, sensaciones positivas y beneficiosas para la salud mental. Otra ventaja tiene que ver con el aprovechamiento del hogar, dado que, gracias a ciertos trucos decorativos, se puede lograr que las estancias adquieran una apariencia más luminosa o espaciosa.
En este aspecto, las combinaciones de colores serán de gran ayuda, debido a que los tonos más claros potenciarán la luz natural de una habitación, por ejemplo. Igualmente cabe destacar las texturas, muy útiles para aportar calidez o incluso dinamismo. Otros elementos decorativos muy populares son las fotografías, las piezas hechas a mano o los recuerdos de todo tipo, así como los textiles, entre los que sobresalen las cortinas o los cojines. Pero hay un elemento que es capaz de elevar la estética de una estancia como ningún otro: las plantas.
Las plantas como elemento decorativo del hogar
La respuesta para decorar esos lugares de la casa que parecen quedarse algo vacíos son las plantas, una manera efectiva de darle un toque fresco al hogar. Patricia Fernández, , asegura que nunca fallan: “Las plantas son el comodín perfecto para decorar aquellos rincones en los que no sabemos qué poner”. Existe una enorme variedad de plantas de interior que son fáciles de cuidar y que cumplirán con su función decorativa a la perfección. Siempre se puede optar por algunas de pequeño o medio tamaño, y hasta por otras más grandes. Lo más importante será asegurarse de conocer sus cuidados y requisitos para escoger la más apropiada para cada rincón.
No obstante, las plantas no solo cuentan con un valor estético dentro del hogar, sino que aportan diversos beneficios a la salud de las personas. Puesto que purifican el aire, por lo que contribuyen a crear un entorno más saludable y natural. Y ayudan a mejorar el ánimo y reducir el estrés, por lo que puede ser una buena opción también para espacios como un despacho o sala de estudio. Una manera sencilla y económica de darle un toque sofisticado y más natural al hogar.