En un mundo hiperconectado, donde las pantallas median nuestras relaciones y la viralidad define lo que merece ser visto, la violencia tambi茅n ha encontrado nuevas formas de manifestarse.听Uno de los fen贸menos m谩s preocupantes que han surgido en este contexto es el llamado happy slapping, pr谩ctica que combina la agresi贸n f铆sica con la difusi贸n digital, creando un espect谩culo donde la v铆ctima es humillada ante una audiencia global.
En los 煤ltimos a帽os, el fen贸meno ha ganado notoriedad debido a varios incidentes alarmantes. Por ejemplo, , la Fiscal铆a General del Estado de Espa帽a advert铆a del incremento de delitos graves cometidos por menores, como el acoso escolar, ataques contra la libertad sexual, violencia intrafamiliar y delitos cometidos a trav茅s de redes sociales.
驴Qu茅 es el 'happy slapping' y c贸mo surge?
Un fotograma de las serie 'Adolescence' de Netflix听
Adem谩s, organizaciones como Save the Children han manifestado su preocupaci贸n por el aumento de la violencia entre ni帽os y adolescentes y han subrayado la necesidad de . Precisamente, esta oeneg茅 public贸 en 2019 donde se estimaba que 76.643 j贸venes en Espa帽a hab铆an sufrido happy slapping durante su infancia.
Lee tambi茅n
Estos casos subrayan la urgencia de abordarlo como una forma de violencia digital que no solo afecta a las v铆ctimas directamente involucradas, sino que tambi茅n perpet煤a una cultura de agresi贸n y humillaci贸n en l铆nea.
El t茅rmino happy slapping (literalmente, 鈥渂ofetada feliz鈥�) , cuando comenzaron a reportarse agresiones f铆sicas registradas en v铆deo con tel茅fonos m贸viles.
La din谩mica es simple: uno o varios agresores atacan a una v铆ctima mientras otro los graba. Posteriormente, el v铆deo se comparte en redes sociales o aplicaciones de mensajer铆a, convirtiendo la violencia en un contenido de entretenimiento.
El atractivo de la violencia viral
Las v铆ctimas de happy slapping no solo sufren consecuencias f铆sicas, sino tambi茅n un profundo da帽o psicol贸gico
Aunque el nombre pueda sugerir una acci贸n menor, los ataques han ido desde simples bofetadas hasta palizas brutales,Un estudio destaca, ya que las im谩genes pueden compartirse indefinidamente.
Adem谩s, otras investigaciones recientes han se帽alado que estos actos pueden vincularse con comportamientos de violencia en la adolescencia, al reforzar din谩micas de grupo que
Y dada su cercan铆a con el alumnado joven, los profesores tambi茅n pueden ser en ocasiones, por desgracia, .
驴Por qu茅 alguien grabar铆a una agresi贸n en lugar de intervenir? La respuesta se encuentra en la l贸gica de las redes sociales y la gamificaci贸n. En la era del 鈥渕e gusta鈥�, las visualizaciones y la validaci贸n digital, cualquier contenido que genere impacto se vuelve valioso. La viralidad puede influir en el comportamiento de los j贸venes, para obtener reconocimiento social.
Lee tambi茅n鈥淟os emoticonos no son inocentes鈥�: qu茅 es la 鈥榤icroinfidelidad鈥� para los j贸venes
Este tipo de violencia digitalizada tiene paralelismos con otras pr谩cticas como el o el revenge porn o 鈥減orno venganza鈥� (difusi贸n de im谩genes sexuales de alguien sin su consentimiento), donde la tecnolog铆a no solo facilita la agresi贸n, sino que la convierte en un espect谩culo. La diferencia radica en que aqu铆 la violencia es f铆sica, aunque su alcance y permanencia se amplifican online.
Impacto psicol贸gico y social
Las v铆ctimas de happy slapping no solo sufren consecuencias f铆sicas, sino tambi茅n un profundo da帽o psicol贸gico. La humillaci贸n p煤blica y la sensaci贸n de desprotecci贸n pueden derivar en trastornos de ansiedad, depresi贸n e incluso ideaci贸n suicida. La difusi贸n del v铆deo intensifica la agresi贸n, ya que las im谩genes pueden ser vistas y compartidas indefinidamente, convirtiendo el sufrimiento en un espect谩culo sin fin.
Lee tambi茅nFrancisco Villar: 鈥淭ecnol贸gicas, 隆Dejad en paz a nuestros j贸venes! El m贸vil les hace da帽o鈥�
Diversos estudios han analizado el impacto psicol贸gico de este fen贸meno. de hace algunos a帽os describ铆a c贸mo 41 adolescentes de tres grandes ciudades inglesas debatieron sobre el happy slapping, proporcionando perspectivas sobre su percepci贸n y consecuencias. Por ejemplo, algunos chicos hablaron de c贸mo ciertos comportamientos violentos eran vistos por sus amigos como signos de 鈥渕asculinidad鈥� o 鈥渃ontrol鈥�.
A nivel social, el happy slapping normaliza la violencia y refuerza la idea de que el entretenimiento puede estar por encima del respeto y la dignidad humana. Adem谩s, la participaci贸n pasiva de quienes visualizan y comparten estos contenidos sin denunciarlo refuerza la impunidad de los agresores. La exposici贸n a contenidos violentos en redes sociales puede aumentar la tolerancia a la violencia y reducir la empat铆a en adolescentes y j贸venes.
驴C贸mo podemos frenar este fen贸meno?
Combatir esta pr谩ctica requiere una estrategia multidimensional que abarque la educaci贸n, la regulaci贸n digital y la responsabilidad colectiva.
- Educaci贸n y concienciaci贸n: es fundamental ense帽ar a los menores sobre el impacto del happy slapping y otros tipos de violencia digital. La educaci贸n digital debe incluir la 茅tica del uso de las redes, la empat铆a y las consecuencias legales de estos actos.
- Regulaci贸n y responsabilidad de las plataformas: las redes sociales para identificar y eliminar este tipo de contenido r谩pidamente. Adem谩s, tienen que implementar mecanismos para denunciar m谩s eficazmente estas agresiones.
- Acci贸n legal: en muchos pa铆ses, el happy slapping puede considerarse un delito de agresi贸n, acoso o incluso incitaci贸n a la violencia. Sin embargo, es necesario un marco legal m谩s s贸lido y 谩gil para perseguir tanto a los agresores como a quienes difunden los v铆deos.
- Responsabilidad social: como espectadores, tenemos el poder de frenar la difusi贸n de estos v铆deos no comparti茅ndolos y denunci谩ndolos en las plataformas. La viralidad no es inevitable: depende de nuestras decisiones individuales y colectivas.
Un problema de todos
El happy slapping no es un problema exclusivo de las v铆ctimas y los agresores. Es un reflejo de una cultura digital que premia lo impactante sin cuestionar sus consecuencias. Si queremos un entorno m谩s seguro y humano, debemos asumir la responsabilidad de lo que consumimos, compartimos y permitimos en el espacio digital.
La violencia no deber铆a ser un espect谩culo. Y la dignidad humana no puede ser moneda de cambio en la econom铆a de la atenci贸n.
Este fue publicado originalmente en The Conversation. Oliver Serrano Le贸n es听Director y profesor del M谩ster de Psicolog铆a General Sanitaria de la Universidad Europea de Canarias, Universidad Europea.
