“Si no necesitas ahora mismo el dinero del plan de pensiones, déjalo en el plan de pensiones”. Esta es la clara recomendación de los distintos expertos consultados por bet365 a la hora de plantearse qué hacer con este producto una vez llegados a los 60 años.“Mucha gente piensa en rescatar el dinero para invertirlo en otros productos y esto es un error. Y más, si se plantea cobrar de golpe”, advierte Albert Sagués, profesor de International Taxation y fiscalidad de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) y socio de fiscal de RSM. Este dinero tributa como rendimientos del trabajo y se interpreta, por lo tanto, que se ha ganado una cantidad importante de dinero.
Pongamos un ejemplo práctico. “Si alguien dispone de 100.000 euros y decide sacarlos de una vez y tiene, además, otros ingresos, Hacienda se puede llevar entre el 37 y el 45%. Esto significa que los 100.000 se convierten en 60.000. He pagado impuestos por dinero que no necesitaba y muchos se plantean luego invertir en algo. ¡Pero si acabas de perder 40.000 euros solo por sacar el dinero! Esto costará mucho de recuperar”, advierte Sagués. “La pregunta clave no es como lo cobro si no, ¿necesito cobrarlo?”.
Si alguien dispone de 100.000 euros y decide sacarlos de una vez y tiene, además, otros ingresos, Hacienda se puede llevar entre el 37 y el 45%
Actualmente, más del 15% de los españoles ahorran para su jubilación con un plan de pensiones individual, un porcentaje que se eleva al 20% si incluimos los planes de Pensiones de empleo. Así lo indican los datos del , que explican también que los principales motivos para ahorrar de la generación baby boomy la anterior, lasilent generation son, en primer lugar, el contar con un remanente para imprevistos y en segundo puesto, complementar la jubilación.
“Hay gente que se lanza a rescatar estos planes sin haber hecho números primero. Y es fundamental. Hay que saber qué va a suponer este rescate, de qué modo va a tributar y decidir en función del dinero que realmente necesitemos cada mes o de qué queremos hacer”, avisa Enrique Devesa, profesor de economía financiera de la Universitat de València, investigador del Ivie (Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas) y delInstituto de Investigación en ʴDZíپs de Bienestar Social, Polibienestar. “Mientras hacemos aportaciones, nos lo deducimos de la renta, pero cuando hay un rescate hay que tributar, aunque en algunos casos está exento de tributación el 40%. Al final, se trata de un diferimiento fiscal. Primero te beneficias, pero luego pagas”.
Hay gente que se lanza a rescatar estos planes sin haber hecho números primero. Y es fundamental. Hay que saber qué va a suponer este rescate, de qué modo va a tributar
Plan de pensiones, ¿el gran desconocido?
¿Cuáles son las opciones? “Hay mucho desconocimiento sobre las posibilidades de un plan de pensiones. Rescatarlo para invertir no tiene sentido, y más cuando con un plan de pensiones se puede hacer lo mismo que con un fondo de inversión. Puedes invertir en renta fija, variable, lo que quieras. Puedes traspasarlo de una entidad a otra sin ningún tipo de limitación e ir ajustando lo que consideremos en función de las necesidades. Y la gente no lo sabe”, nos explica Sagués.
El especialista añade que “una de las primeras cuestiones a tener en cuenta cuando llegamos a los 60 es plantearnos cuáles serán nuestras necesidades financieras. Decidir dónde y cómo invertir depende de si necesitamos la rentabilidad para vivir o no. Si cuando me jubile creo que podré vivir con la pensión, entonces me puedo plantear inversiones a largo plazo. Si no es así, deberé estudiar cómo conseguir el dinero extra que necesito cada mes con el plan de pensiones que tengo. Ver cómo puedo obtener esta rentabilidad extra”.
A partir de los 60 debemos decidir dónde y cómo invertir, depende de si necesitamos la rentabilidad para vivir o no

A partir de los 60 debemos decidir dónde y cómo invertir, depende de si necesitamos la rentabilidad para vivir o no.
Dicen las encuestas que la mitad de los españoles espera ahorrar lo suficiente para tener una jubilación cómoda. Así lo recoge el , que se acaba de publicar, y que sitúa España entre los cinco países con el mayor porcentaje de ciudadanos que manifiestan esta confianza. Además, 4 de cada 10 encuestados tienen previsto realizar inversiones para mejorar sus perspectivas financieras a largo plazo. Según datos de Inverco, el 87% de los ahorradores tiene contratados depósitos. Los planes de pensiones (54%) y los fondos de inversión (40%) se mantienen como la segunda y tercera opción de inversión, respectivamente y la Renta Fija sube 7 puntos.
El profesor de fiscalidad de la Universidad Pompeu Fabra también recuerda que los planes de pensiones no pagan impuesto de sucesiones. “Paga la renta quien lo cobra, pero no hay sucesiones. Y además, la gente no sabe que una vez ha fallecido el propietario del plan de pensiones, no estamos obligados a sacar el dinero. Es una hucha blindada, eso sí, donde no puede entrar más dinero, pero mientras no lo saquemos no tendremos que pagar impuestos, así que podemos esperar”.
Otra de las opciones por la que optan algunas personas es designar a los nietos como beneficiarios de los planes de pensiones, de modo que se diluye notablemente el impacto fiscal a la hora de un rescate, ya que los jóvenes tienen ingresos por rentas del trabajo menos cuantiosos que un adulto.
Más de la mitad de los ahorradores (53%) tiene una menor capacidad de ahorro por la inflación. Y contar con un remanente para imprevistos ha crecido diez puntos en cuatro años, consolidándose como principal razón para ahorrar (del 30% en 2019 al 40% en 2023). “La gente tiene poca información y es un tema importante. Lo último que recomendaría utilizar a una persona mayor es el dinero del plan de pensiones. Se debe utilizar para conseguir el dinero extra que necesitemos para la pensión, pero no más”, explica Sagués.
Otras opciones
¿Cómo podemos conseguir dinero extra?
Si una persona tiene claro que la pensión de jubilación no le llegará para vivir y tiene algunos ahorros, deberá estudiar qué productos le pueden dar la rentabilidad extra que necesita para vivir bien. “A nivel de inversión —explica el especialista de la UPF— puedes elegir entre el amplio abanico de productos financieros que hay; puedes invertir en el sector inmobiliario; o incluso optar por inversiones alternativas a los mercados financieros como son los metales preciosos o las criptomonedas. La rentabilidad siempre estará ligada al riesgo y a la liquidez, entendida como la facilidad para convertir la inversión en dinero de una manera rápida”.
La seguridad y la confianza continúan siendo los factores más valorados a la hora de tomar una decisión de inversión, mientras que la transparencia supera a la rentabilidad. Invertir en bolsa o en productos financieros nos permite sacar el dinero de un día para otro en caso de que cambien nuestras necesidades. “Pero hay que tener en cuenta la aversión al riesgo del cliente”, avisa el profesor Devesa.
“A todo el mundo le gusta ganar dinero —añade Sagués—, pero no hay duros a cuatro pesetas. Si te dicen que ganarás un 25% tienes que estar dispuesto a subir a un Dragon Khan. Y si este dinero es necesario, hay que pensárselo. Para garantizar el mínimo extra para vivir en condiciones normales, puedes optar por una inversión que garantice el efecto de la inflación, es decir, que como mínimo ganes un 2%. En el caso de un inmueble, puedes vender rápido, pero otras veces puede ser lento, depende del dinero que esperes cobrar”.
¿Y qué hay de las criptomonedas? El profesor de la UPF lo tiene claro. “No lo trataría como un ahorro, sino como una inversión especulativa. Es justificable, decente y válida, pero es especulativa. Su precio aumenta porque hay demanda que incrementa su valor. En cambio, cuando invierto en acciones de una empresa, sé que tendré unos beneficios u otros en función de una gestión”.
Perfil del ahorrador mayor de 60
Estabilidad antes que rentabilidad
Los ahorradores mayores de 60 años en España, principalmente babyboomers y silent generation, tienen un perfil marcadamente conservador (62%-63%). Así lo recoge el VIII Barómetro del Ahorro del Observatorio Inverco, que también indica que buscan seguridad y confianza en sus inversiones, priorizando los depósitos (85%-89%), los planes de pensiones – 70% en el caso de la generación baby boom - y los fondos de inversión (40%-49%).
La inflación ha reducido la capacidad de ahorro de más del 60%. Y al 21% les ha afectado negativamente la subida de tipos por contar con un préstamo o una hipoteca.
El 43% de los nacidos entre 1945 y 1964 ahorra para disponer de un remanente para imprevistos, el 31% para complementar su jubilación y el 21% para hacer crecer su capital sin un fin determinado.
Aunque muchos mantienen su inversión a largo plazo, el 65% prefiere delegar la gestión en profesionales. La oficina bancaria sigue siendo su principal fuente de información y contratación, con un 85% recurriendo a este canal.
A la hora de invertir, priorizan estabilidad sobre rentabilidad y muestran un bajo interés en productos ESG, que son los relacionados con factores ambientales, sociales o de gobierno corporativo.es que rentabilidad
Ante las dudas, algunos optan por ir a la entidad bancaria. La generación baby boom es la que mayor preferencia muestra a la hora de informarse a través de una oficina (67%), mientras que este porcentaje está por debajo de la mitad entre las generaciones más jóvenes.
Otra opción es recurrir a un EAFI, una figura poco habitual en España, pero más común en otros países, como Estados Unidos. Se trata de una empresa de asesoramiento financiero que requiere de la autorización y registro - en el caso español - de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Sea como sea, coinciden los expertos, “lo más importante es hacer primero una planificación de lo que vamos a necesitar para vivir como nosotros queremos (pero siendo realistas)”.